■ Banamex y Scotiabank pronostican desplome de 0.2 y 0.7 por ciento, respectivamente
Barclays Capital: la economía mexicana caerá en terreno negativo el año próximo
■ Considera insuficientes las medidas del gobierno para afrontar la crisis financiera mundial
Las acciones emprendidas por el gobierno federal para hacer frente a la crisis financiera mundial no serán suficientes para evitar que la economía mexicana caiga al terreno negativo el próximo año. Así lo estimó este miércoles Barclays Capital, una de las principales firmas financieras del mundo, en un reporte sobre el país titulado México: ninguna armadura es lo suficientemente gruesa.
“A pesar de los esfuerzos encomiables del gobierno mexicano para minimizar el impacto de la recesión estadounidense, el crecimiento económico de México caerá al terreno negativo en 2009”, consideró la firma financiera.
Barclays Capital estimó que el próximo año el producto interno bruto (PIB) de México registrará una tasa negativa de 0.8 por ciento, pronóstico que contrasta con el sostenido todavía ahora por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que asegura que la economía del país repuntará 1.8 por ciento en 2009.
Para la firma financiera, el Banco de México responderá al entorno de menor crecimiento con un relajamiento de las condiciones monetarias –es decir, con una disminución de su tasa de interés de referencia, actualmente en 8.25 por ciento anual– en la primera parte de 2009.
Las acciones de política fiscal emprendidas por el gobierno federal para estimular la actividad en una etapa de menor crecimiento y la diversificación comercial del país, aseguró la firma especializada, no serán suficientes para evitar que el PIB de México sea arrastrado por la recesión estadounidense. Dado que 8 de cada 10 dólares de las exportaciones mexicanas se concretan en Estados Unidos, el impacto sobre el crecimiento mexicano de una recesión en aquel país es significativo.
Otro facto externo que afectará el comportamiento de la economía mexicana, añadió, tiene que ver con las remesas, un flujo de divisas que en los últimos años estuvo arriba de los 20 mil millones de dólares por año. Este ingreso de recursos que envían los mexicanos que trabajan en Estados Unidos a sus familias aquí disminuirá en la medida en que la recesión en aquella nación se profundice, añadió Barclays.
“Los negocios y la confianza de los consumidores han sido dañados profundamente, lo que potencialmente puede resultar en una transmisión hacia la economía interna más rápido que lo usual”, agregó.
En ese sentido, la firma financiera calculó que el próximo año el consumo privado prácticamente se estanque, con una tasa de crecimiento anual de 0.3 por ciento, comparada con el aumento de 3.5 por ciento previsto para 2008. También pronosticó que el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos (que mide el saldo entre las entradas y salidas de divisas por comercio, inversiones, turismo, pago de deuda y remesas) sea negativo el siguiente año en 23 mil 500 millones de dólares, cantidad equivalente a 2.4 por ciento del PIB de 2009. En 2008, el déficit previsto por Barclays Capital es equivalente a 1.6 por ciento del PIB.
Anticipó también que en 2009 la inversión tendrá una tasa negativa de 7 por ciento en términos reales, que contrasta con el aumento de 4.5 por ciento considerado para 2008.
Po su parte, especialistas de dos de los seis más importantes grupos financieros del país, Banamex y Scotiabank, pronostican una caída de 0.2 y 0.7 por ciento, respectivamente, para la economía nacional el año entrante.
Por Banamex, los analistas Sergio Luna, Sergio Kurczyn, Eduardo González y Arturo Vieyra, anunciaron ayer: “esperamos que el PIB (producto interno bruto) caiga 0.2 por ciento para 2009”, desde una proyección anterior positiva de crecimiento marginal de 0.5 por ciento.
Por su parte, el analista de Scotiabank, Francisco Gutiérrez, también alertó que como consecuencia de una contracción de 1.8 por ciento en la economía estadunidense para 2009, “la economía mexicana también experimentará un periodo de crecimiento negativo”, el cual ubicó en menos 0.7 por ciento.
Sendos análisis de los grupos financieros, que se encuentran entre los más importantes del país, prevén que la ya declarada recesión en Estados Unidos arrastrará a la economía mexicana.
Los especialistas de Banamex exponen en su análisis que “los riesgos a la baja en la actividad económica se están materializando: creemos ahora que la economía mexicana no podrá alcanzar uhna tasa de crecimiento positiva en 2009” por varios factores, entre ellos, la recesión en Estados Unidos cuyos efectos sobre las exportaciones y la producción industrial ya comienzan a materializarse. “Las expectativas pueden estar jugando un papel relevante, pero parece indudable que, desde octubre, el ritmo de la desaceleración se ha incrementado”, puntualizan.
Para el analista de Scotiabank, Francisco Gutiérrez, el sector más afectado en el país será la industria, particularmente la manufacturera, aunque advierte que la desaceleración llegará también a los servicios. En un balance preliminar menciona que la economía estadunidense experimenta una rápida y profunda contracción como lo demuestra la caída en el consumo, las exportaciones y el empleo.