■ Cuestiona el celibato de sacerdotes y el uso de anticonceptivos
Tabús de la Iglesia católica, en la mira del cardenal Carlo Martini
Al pedir que la Iglesia católica reconsidere temas que hasta ahora han sido tabúes, como el uso de anticonceptivos, el celibato de los sacerdotes, el papel de las mujeres en la conducción sacerdotal y la comunión de los divorciados, el cardenal italiano retirado Carlo María Martini recoge posiciones de sectores eclesiales cada vez más amplios, que piden al papa Benedicto XVI reformas en el interior de la Iglesia.
Al comentar el más reciente libro del prelado italiano, titulado Coloquios nocturnos de Jerusalén, el Observatorio Eclesial recuerda que han sido muchas las voces, entre ellas la del cardenal Martini, que han planteado al Papa que encare una nueva etapa al frente de la vida eclesiástica con amplias reformas que podrían revolucionar la vida de miles de millones de católicos.
En su obra, Martini, sacerdote jesuita, quien fuera cardenal de Milán y mencionado como papable, publicó recientemente su libro en el que se pronuncia en favor de las ideas de los sectores más progresistas de la Iglesia católica, en abierta contraposición a los grupos conservadores que defiende Joseph Ratzinger, convertido en el Papa Benedicto XVI.
Entre otros temas polémicos, Martini pide reconsiderar un tema que hasta el momento es considerado tabú para el catolicismo: la comunión de los divorciados. Para el cardenal, es tiempo de replantear este tema así como la prohibición al uso de anticonceptivos de todo tipo.
Crítica la Humanae vitae
Aunque el tema más espinoso ha resultado el celibato para los sacerdotes. Para Martini, en algunos casos se debería permitir el sacramento del matrimonio para los curas que así lo prefieran. Incluso, el cardenal postula la necesidad de replantear el papel de la mujer en la conducción sacerdotal, reseña el Observatorio Eclesial.
De manera particular, el cardenal toca el tema de la sexualidad y las posiciones que ante ella mantiene la Iglesia católica y su jerarquía. Crítica acremente la enorme distancia que hay entre la encíclica Humanae vitae y la realidad. “Muchos ya no toman más en serio a la Iglesia como interlocutora o como maestra. Sobre todo nuestros jóvenes que ya casi ni recurren a la Iglesia por temas como la planificación familiar o la sexualidad”, asegura.
Sin embargo, se muestra pesimista respecto de la posibilidad de que el actual Papa retire esa encíclica. “Hubiese sido mejor guardar silencio” sobre ciertos temas referidos a la sexualidad, dice el religioso jesuita, quien es reconocido también por sus constantes debates con los intelectuales.
Hace ya algunos años, Martini desató una gran polémica en la cúpula de la Iglesia: se había mostrado en favor del uso del preservativo en las relaciones sexuales, argumentando que de esta manera se estaba ante un “mal menor”.