■ Protestan ONG por extradición de campesinos a Paraguay
Entra en vigor ley que autoriza ejercicios militares de extranjeros en Argentina
Buenos Aires, 3 de diciembre. La ley que autoriza el ingreso de contingentes militares extranjeros y la salida de tropas nacionales para participar en ejercicios combinados fue puesta en vigencia hoy aquí, después de ser aprobada a principios de noviembre pasado por el Parlamento, con escasa difusión en los medios.
Publicada en el Boletín Oficial del Estado, comienza a regir a partir de hoy para realizar ejercicios combinados de fuerzas terrestres, navales y aéreas que se lleven a cabo hasta el 31 de agosto de 2009, cuando están previstas varias maniobras aquí y en el extranjero con ejércitos de Brasil, Uruguay, Chile, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Bolivia, entre otros países.
Hasta ahora, el Parlamento se ha negado a aprobar la inmunidad diplomática a militares estadunidenses que participen en el país de maniobras conjuntas, como sí sucedió en Uruguay a mediados de 2005, a espaldas de la población.
En Argentina se protagonizaron grandes manifestaciones en contra de maniobras militares que Estados Unidos dirigía con la intervención de otros ejércitos y con diseños intervencionistas en la región. Incluso no se pudo realizar aquí una de las tantas maniobras Cabañas en el noroeste del país ante la generalizada protesta de movimientos sociales, políticos y humanitarios.
Washington reconoce jurisdicción al Tribunal Penal Internacional y por esa misma razón hay un fuerte rechazo a su pedido de inmunidad.
Ya se han realizado ejercicios conjuntos con Chile y también se planean otros con ejércitos de la región. Pero habrá que confirmar cómo funcionará esto con Estados Unidos, aunque en ocasión de la presencia de la IV Flota estadunidense recientemente activada, hubo encuentros con la marina argentina y se realizaron encuentros y algunos primeros ejercicios. Todo esto ha sido denunciado por el Centro de Militares Democráticos (CEMIDA) en los últimos tiempos.
En tanto, diversos organismos de derechos humanos, partidos y movimientos de izquierda rechazaron la decisión de la justicia local de extraditar a seis campesinos paraguayos requeridos por la justicia de su país, acusados de participar en el secuestro y asesinato de Cecilia Cubas, hija del ex presidente Raúl Cubas, y que según algunas evidencias perpetraron sectores policiales paraguayos.
“La infamia consumada: extraditaron a los seis compañeros paraguayos” titula hoy un boletín de información de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA). La decisión se tomó a pesar de que no existen pruebas sobre este caso, y de las presentaciones de personalidades de los derechos humanos como Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de las Paz, Martín Almada, Premio Nobel Alternativo y descubridor de los archivos de la pasada dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989).
La detención de los campesinos cuando buscaban refugio aquí, fue repudiada desde un principio por todos los organismos y fueron presentadas pruebas y testimonios por sus defensores locales, pero en este caso se mostró una dura posición gubernamental.
Este día se hizo efectiva “esta orden del juez Ariel Lijo, avalada por la Corte Suprema de Justicia y allanada por la decisión del Poder Ejecutivo de negar el asilo político a los compañeros paraguayos que en 2006, huyendo de la persecución judicial, alentada e impulsada por las embajadas de Estados Unidos y Colombia, que buscan respaldo a sus tesis militaristas contra la insurgencia colombiana, se refugiaron en nuestro país por consejo del embajador argentino Rafael Romá”, señala la CTA.
También advierten que esta decisión rompe una larga tradición “americana y nacional de respetar la figura del refugio político que fue utilizada desde Sarmiento (Domingo Faustino) y Juan Bautista Alberdi” hasta ahora.