■ Habrá competencia desleal, dicen diputados de cinco partidos
Cambios a la ley de IED posibilitarán a Telefónica prestar el servicio fijo
La iniciativa de reforma a la Ley de Inversión Extranjera, que será incluida en el orden del día de este jueves en la Cámara de Diputados, permitiría a la trasnacional Telefónica Movistar acceder al servicio de telefonía fija, “una grave competencia desleal”, porque la española tendrá facultades que pocas empresas en el mundo tienen en materia de telefonía, advirtieron diputados de PRD, PRI, Convergencia y Partido de Trabajo.
El citado dictamen, que será sometido al pleno de la Cámara de Diputados para su discusión no incluye una cláusula de reciprocidad que garantizaría a empresarios mexicanos su entrada al mercado español sin trabas legales y con los mismos beneficios que obtendría, en México, Telefónica Movistar.
“La ley está hecha a la medida de Francisco Gil Díaz, quien se encargó de impulsarla, cabildearla y dar seguimiento a su aprobación entre aquellos diputados afines a la trasnacional española. No vamos a permitir que tal descaro se apruebe, porque de concretarse, Francisco Gil Díaz pasará a ser el principal expoliador de los bienes nacionales”, sostuvo José Murat, representante del PRI.
Las facilidades que se darían a la empresa de telecomunicaciones en México, romperían con el frágil equilibrio que la ley ha creado para darles certeza a las empresas de nuestro país, insistió el ex gobernador de Oaxaca.
“Sería absurdo que se abriera la puerta a las empresas extranjeras en perjuicio de las mexicanas, a las que tanto trabajo ha costado convertirse en modelo de crecimiento económico y financiero en nuestro país; todo esto nos lleva a Gil Díaz, quien ahora se dedica a fungir como director de la empresa, gracias a los contactos que logró establecer con empresas privadas durante sus actividades al frente de la Secretaría de Hacienda”, puntualizó Murat.
En ese sentido, Juan Guerra Ochoa advirtió el riesgo que implicaría para las actividades económicas del país que se aprobara la reforma a la Ley de Inversión Extranjera, porque el Congreso federal “estaría dando un pésimo ejemplo, y peor señal aún de descuido de las empresas y empresarios mexicanos para favorecer a capitales extranjeros”
En tanto, José Manuel del Río Virgen, diputado por Convergencia, emplazó al pleno de la Cámara de Diputados a ”valorar con detalle y detenimiento” la reforma a la Ley de Inversión Extranjera porque se estarían “entregando de forma absurda los servicios y bienes nacionales que sólo deberían de ser controlados por mexicanos. La sensatez debe imperar porque de lo contrario la señal hacia fuera de al Cámara de Diputados serían interpretada por la ciudadanía como un gesto de complicidad hacia los sectores más poderosos del país”.
Silvano Garay, diputado por el PT, calificó de acto desafortunado la aprobación del dictamen en comisiones legislativas, “con la única perspectiva de garantizar a empresas trasnacionales condiciones que nunca podrán encontrar en otros países; esta segunda desnacionalización se suma a la serie de actos y hechos que con el tiempo harán pagar al país la desafortunada apertura que ahora el PRI y el PAN intentan imponer como modelo de desarrollo. No cabe duda que el capitalismo aún se resiste a perder”.