■ Los próximos altos funcionarios conforman un “círculo de rivales”, estiman analistas

Presenta Barack Obama su equipo de seguridad nacional y política exterior

■ Llama a 6 veteranos de la cúpula política de EU porque “confío en las personalidades fuertes”

■ Clinton, Gates, Jones, Holder, Napolitano y Rice trabajarán por el nuevo liderazgo del país

David Brooks (Corresponsal)

Nueva York, 1º de diciembre. Barack Obama presentó hoy a su equipo de seguridad nacional y política exterior, integrado por su ex rival electoral, el actual secretario de Defensa, y un general amigo de su contrincante republicano, entre otros veteranos de la cúpula política nacional que se encargarán de llevar a cabo lo que el presidente electo calificó como “un nuevo comienzo, un nuevo amanecer del liderazgo estadunidense” en el mundo.

Obama indicó que habrá un giro en la política exterior donde se integrarán los otros elementos además del militar del “poder nacional” en el ámbito internacional. “Tenemos que seguir una nueva estrategia que hábilmente emplea, equilibra, integra todos los elementos del poder estadunidense, el militar, el diplomático, nuestra inteligencia y procuración de ley, nuestra economía y el poder de nuestro ejemplo moral. El equipo que hemos conformado aquí hoy está hecho justo para hacerlo”.

En lo que no pocos consideran más bien el principio del ocaso del poder estadunidense a nivel mundial, Obama nombró a seis veteranos de la cúpula política sin ninguna cara que pudiera llamarse “nueva” y muchas que participaron, o por lo menos asintieron, en lo que ha sido una larga noche de ocho años en la política exterior y de seguridad.

De hecho, entre los nombrados está Robert Gates, quien se mantendrá en el puesto de secretario de Defensa y quien ha sido el encargado de administrar las dos guerras (Irak y Afganistán) para el presidente George W. Bush durante los últimos casi dos años.

La senadora Hillary Clinton fue nombrada como próxima secretaria de Estado a pesar de sus supuestas serias diferencias con Obama sobre el manejo de política exterior, incluido su voto para autorizar la guerra en Irak.

Y el general James Jones fue nombrado su asesor de Seguridad Nacional, a pesar de su larga amistad con el senador John McCain, el contrincante de Obama en las elecciones generales, y alguien que anteriormente criticó algunas de las posiciones del presidente electo.

Obama, en Chicago, también presentó hoy a los otros integrantes de su llamado “equipo de seguridad nacional”: Eric Holder como el próximo procurador general y jefe del Departamento de Justicia; Janet Napolitano, la actual gobernadora de Arizona, como próxima secretaria del Departamento de Seguridad Interna (el cual incluye responsabilidad en asuntos de migración y frontera), y Susan Rice como representante permanente de Estados Unidos ante la Organización de Naciones Unidas (un puesto al que será otorgado rango de gabinete).

“Estoy confiado en que este es el equipo que necesitamos para hacer un nuevo inicio para la seguridad nacional estadunidense”, afirmó Obama después de presentarlos en conferencia de prensa esta mañana.

Para algunos, el elenco anunciado hoy es un “círculo de rivales” que provoca interrogantes sobre si todos podrán trabajar juntos, empezando con Clinton y su capacidad de subordinarse ante el que fue hace poco su rival, a quien calificó como alguien sin suficiente experiencia para ser comandante en jefe.

Obama respondió a estas preocupaciones al comentar: “conformé este equipo porque soy un firme creyente en personalidades fuertes y fuertes opiniones. Creo que así se toman las mejores decisiones”; afirmó que dará la bienvenida a un “vigoroso debate” dentro de la Casa Blanca, pero a la vez subrayó que él tomará las decisiones finales, “yo seré el responsable de la visión que llevará a cabo este equipo….”.

Enfatizó que hay una acuerdo de fondo entre todos, incluido el de mantener la fuerza militar más poderosa del planeta, pero que también “la fuerza militar tiene que ser combinada con la sabiduría y fuerza de nuestra diplomacia y que estamos comprometidos con reconstruir y fortalecer las alianzas por todo el mundo para promover los intereses y la seguridad estadunidenses”.

El cálculo militar

Algunos observadores vieron el nombramiento de Gates y Jones como un cálculo para fortalecer las relaciones de un presidente electo sin experiencia militar con las fuerzas armadas. Además, Gates y Jones comparten la idea de Obama de emplear el “poder suave” (diplomacia y asistencia) con el poder militar en los conflictos actuales y futuros, y de que Afganistán es el frente clave en la “guerra contra el terror”.

Hoy Obama reiteró su intención de enfocarse sobre la guerra en Afganistán, a pesar de que no pocos críticos recuerdan que ese país ha sido conocido como el “panteón de los imperios” a lo largo de la historia.

Obama reafirmó que Gates será encargado de “una nueva misión”: concluir la guerra en Irak y retirar las tropas de combate estadunidenses en un plazo de 16 meses. Y condicionó ese compromiso afirmando que consultará con sus “comandantes” para asegurar que sea un proceso “responsable”, y dijo que aunque se retiren las tropas de combate, permanecerá una “fuerza residual” para fines de capacitación y seguridad.

Migración

Napolitano, gobernadora de Arizona, será, al encabezar el Departamento de Seguridad Interna, la principal funcionaria encargada de asuntos de migración. “Ella entiende como ninguna otra personal el peligro de una frontera insegura”, indicó Obama al presentarla.

Para algunos expertos, su nombramiento es bienvenido ya que “su experiencia como gobernadora de un estado fronterizo profundamente involucrada en asuntos de migración será excepcionalmente relevante en su nuevo papel”, dijo hoy Demetrios Papademetriou, presidente del Instituto de Políticas Migratorias (MPI) en Washington. La ex comisionada de migración Doris Meissner, también ahora de MPI, comentó que Napolitano será la primera secretaria “que llega a su puesto con un conocimiento fuerte y matizado de la política migratoria”, lo que ayudará a llenar “el vacío de políticas dejado por la inacción de Washington sobre migración en años recientes”.

Sin problema

Políticos veteranos de ambos partidos elogiaron la designación de este nuevo equipo, y para algunos liberales y progresistas se nutrió aún más cierta desilusión de que el “cambio” prometido por Obama no está manifestado en estos nombramientos.

Y aunque por ser todos políticos de larga trayectoria en Washington (con la excepción de Napolitano), no se espera ninguna traba para su ratificación por el Congreso. Sin embargo, algunos podrían enfrentar interrogatorios incómodos sobre su participación en decisiones políticas sobre la guerra en Irak y asuntos de manipulación de inteligencia en el caso de Gates, como el papel de Holder como abogado defensor de la empresa Chiquita acusada de pagar millones y hasta entregar armas a grupos paramilitares responsables de miles de muertes en Colombia.