■ En el Orientación, hazañas de dos gemelos
Jocosa, obra de teatro aborda el universo maya
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Los temas que toca Las aventuras de Hun e Ix, los gemelos divinos, tan vigentes como hace siglos
Foto: Mariana Barreiro
El niño estaba parado frente a la butaca del teatro, mirando absorto el extraño juego de pelota que se llevaba a cabo en el escenario. De vez en cuando volteaba a preguntarle cosas a su madre. Cuando, al final de la obra, ofrecieron que quien quisiera podía acercarse a mirar de cerca los curiosos instrumentos musicales –desde una simple cubeta con agua, una jícara con granos de maíz, hasta un tambor marroquí– el pequeño espectador fue de los primeros en presentarse con el percusionista.
La compañía teatral Las Mentirosas (www.lasmentirosas.com) presenta una historia del Popol Vuh, el libro sagrado de los mayas quichés, como lo que es: una historia viva, actual, que concierne a este mundo tanto como hace siglos. Una historia que a pesar de contener la sabiduría de los antepasados de esa región y que por ello resulta indispensable para entender quiénes somos, se conoce poco. “A veces se estudia en la escuela, pero no se tiene tan presente como otros (textos) que vienen de fuera”, dijo Giovanna Cavasola, integrante de la compañía teatral, junto con Marilú Carrasco.
Trabajo vigente
La obra se acerca al universo maya de manera incluso jocosa, sin lo acartonado y provocador de bostezos de los libros de texto escolares. Por ejemplo, presentan un juego de pelota narrado como si fuera una final de futbol.
Las aventuras de Hun e Ix, los gemelos divinos cuenta cómo Hunahpú e Ixbalanqué luchan contra la soberbia, la oscuridad y el miedo, tema de lo más vigente.
La actualidad de la obra fue una de las cosas que motivó a Carrasco y Cavasola a realizar la puesta en escena. “Los gemelos se enfrentan a los soberbios, que han olvidado su corazón, que son humanos pero atentan contra la comunidad, y después se enfrentan contra los señores del infierno, de Xibalbá”, describió Cavasola, que representan “los males que afectan a la humanidad”. Los hermanos no tienen más que su ingenio y a los seres de la naturaleza como aliados.
En la obra no se pretende usar lo último en tecnología ni recurre a costosos efectos especiales. Más bien se apoya en lo antiguo y sofisticado: usa distintos recursos, como el teatro de sombras, los títeres y la animación de objetos, para darle dinamismo, lo cual logra, a juzgar por el interés puesto por los niños presentes en la función del domingo pasado.
Respecto de la animación de objetos comentó en entrevista telefónica la actriz: “Hay una parte del Popol Vuh que habla acerca de que los objetos cobran vida”.
En la puesta en escena básicamente se usan materiales de la naturaleza, como hojas de maíz.
En un principio, Las Mentirosas se inspiraron en una versión de Eduardo Galeano de esta historia del Popol Vuh y simplemente hicieron una versión contada en escenario. La llevaron a Madrid, entre otros lugares. Despertó tanto interés que decidieron hacer la presente adaptación teatral, para la cual, contó Cavasola, usaron varias versiones del Popol Vuh.
Dan el soplo de vida a títeres, sombras y objetos: Las Mentirosas (Marilú Carrasco y Giovanna Cavasola). Músico en escena: Ismael Palomares. Música original: Jerónimo Rajchenberg.
La obra se presenta hasta el 7 de diciembre, los sábados y domingos a las 12:30 horas, en el Teatro Orientación, del Centro Cultural del Bosque (Reforma y Campo Marte). Se recomienda para niños mayores de 6 años.