■ Un empleado de Wal-Mart fue arrollado por la turba; en una juguetería balearon a dos

Crisis en EU marca el viernes negro que da comienzo a la temporada navideña

■ Comerciantes colocan la mitad de lo que venden en el año; transacciones repuntaron sólo 2.2%

Afp y Dpa

Washington, 28 de noviembre. Con los estómagos aún llenos del pavo de Acción de Gracias, cientos de miles de estadunidenses se lanzaron hoy a las tiendas y grandes almacenes de todo el país en el tradicional “Viernes Negro”. Esta vez la fecha se vio marcada por la tragedia al morir un empleado de Wal-Mart arrollado por la muchedumbre y dos personas más baleadas al interior de una juguetería.

El día posterior a Acción de Gracias es, desde hace años, el día de mayores ventas en todo Estados Unidos. Se le llama “Viernes Negro” porque es el día en que los comercios normalmente comienzan a convertir sus números rojos en negros. Dado que Acción de Gracias se celebra siempre el cuarto jueves de noviembre, el “día de las compras” es siempre viernes.

Es también la jornada que da inicio oficialmente a la temporada de compras navideñas, que según la Federación Nacional de Comerciantes (NRF) moverá este año más de 470 mil millones de dólares, aproximadamente el 50 por ciento de las ventas anuales del sector.

La cifra supone sólo un incremento de 2.2 por ciento respecto del año pasado, el menor crecimiento desde 2002. La NRF cree además que el número de compradores este fin de semana se reducirá a 128 millones en relación con los 135 millones del año anterior.

Desde hace días las tiendas se prepararon reponiendo sus estanterías. Los buzones y diarios de todo el país se llenaron con cientos de folletos anunciando descuentos de hasta 50 por ciento y la apertura de tiendas desde la madrugada. En muchas de ellas las rebajas eran incluso mayores si se acudía en las primeras horas de apertura.

La promoción de los establecimientos sólo para hoy llegó a límites inimaginables. Una tienda de electrodomésticos en la ciudad de Washington organizó un concurso en busca del “máximo fan del Viernes Negro”. El ganador, David Zaterka, pudo entrar a la tienda hoy una hora antes que el resto del público y comprar con un cheque de mil dólares regalado por la tienda.

Zaterka, de 45 años y llegado desde Carolina del Norte sólo para el acto, agradeció la atención personalizada de los empleados, pero aseguró que el día no fue igual. “Voy a echar de menos eso de pensar ‘¿Voy a conseguir algo o no?’ Yo siempre me pongo unas expectativas bajas”.

La “fiebre” que afecta a Zaterka y otros muchos se confirmó una vez más con largas filas al frente de numerosos comercios. Algunos de éstos ni siquiera esperaron al viernes: en Woodburn, en el estado de Oregon, la tienda de la marca de ropa deportiva Nike abrió a las 20:45 del jueves.

La apertura desató la locura

En una tienda de la conocida cadena Wal-Mart en la localidad de Valley Stream, en el estado de Nueva York, uno de los empleados, de 34 años, murió de un aparente infarto, según reportó la cadena de televisión ABC. El hombre fue arrollado por la masa de compradores cuando las puertas se abrieron a las 5 de la mañana. Otros cuatro trabajadores resultaron heridos.

En California dos personas murieron durante un tiroteo en el interior de una tienda de juguetes, según reportó la televisión local KESQ, citando a la policía.

El drama se produjo en una tienda Toys R Us, de Palm Desert, una ciudad situada a 200 kilómetros al este de Los Ángeles, según la misma fuente.

Varias personas fueron arrestadas por la policía, que cerró los alrededores, según las imágenes retransmitidas en directo por KESQ. Ningún otro detalle sobre las víctimas o los sospechosos estadá disponible de momento.

Según la cadena de televisión CNN, los productos estrella de la temporada son las videoconsolas, en particular la Nintendo Wii combinada con el juego Guitar Hero.

Las tiendas, sin embargo, aseguraron notar la crisis. Mike Papp, gerente de una tienda de electrónica Best Buy, en Weaverton, en Oregon, explicó a The New York Times que las cestas con películas en DVD a cinco dólares se estaban vaciando a mucha mayor velocidad que los estantes con las televisiones planas, que fueron la estrella el año pasado.

Pese a ello, los reportes de escenas de violencia o simplemente de histeria se multiplicaron en establecimientos de todo el país, con gente defendiendo sus compras a mitad de precio como si se se les fuera la vida en ello.