Correo a Ciencias
Se deslinda de declaraciones sobre terapia intracelular para distrofia muscular
Debido a mis ocupaciones profesionales no me es posible leer en forma cotidiana las notas publicadas en su prestigioso diario. Por esta razón no me enteré en su momento de la nota de la redacción del día 20 de junio del presente en la sección de Ciencias, acerca de una “terapia intracelular contra la distrofia muscular”, en la cual se me atribuyen diversas declaraciones.
Manifesto que nunca fui entrevistado por La Jornada (ni tampoco por otras instancias) al respecto y que mi campo de interés principal no es la distrofia muscular. Comento, además, que varias de las aseveraciones hechas no son correctas. Por ejemplo, se me atribuye haber dicho que esta enfermedad afecta al 10 por ciento de la población mundial, cuando la cifra correcta es de sólo 0.002 por ciento. No se trata por lo tanto de un problema de salud pública, sino de una enfermedad de muy baja frecuencia cuyo interés es básicamente científico.
Como ésta, hay otras inexactitudes que pueden confundir a los lectores. Ignoro el origen de la confusión.
Jorge Alberto Sánchez Rodríguez, Farmacología, Cinvestav-IPN
N de la R
La información publicada fue reproducida de un comunicado que hizo llegar a esta redacción la oficina de Comunicación Social del Instituto Politécnico Nacional.
Omiten nombres de colaboradores en trabajo acerca de la Giardia duodenalis
Con atención e interés leí el reportaje De la Redacción sobre nuestro trabajo relacionado con la detección de nucleolos en Giardia duodenalis, publicado el pasado septiembre en el International Journal for Parasitology (Int J Parasitol. 2008 Sep;38(11):1297-304). Al respecto quiero aclarar y añadir lo siguiente: en el reportaje de La Jornada en la sección Ciencias del 22 de noviembre se señala que los estudios reportados por nosotros se relacionan con el “encuentro del eslabón perdido de las bacterias”.
En realidad nuestros estudios rompieron un paradigma y mostraron de manera contundente que Giardia duodenalis, un parásito protozoario de divergencia temprana en la evolución de los organismos eucariontes, contiene nucleolos. Este hallazgo indica que este microorganismo, que se ha adaptado a vivir como parásito en el intestino delgado del hospedero en condiciones muy adversas, posee la maquinaria mínima para el ensamblaje nucleolar y para reunir los elementos necesarios para la biogénesis del ribosoma el cual participa en la síntesis de proteínas.
La adición se refiere a que el trabajo en referencia se realizó en una colaboración del grupo de la Facultad de Ciencias de la UNAM con Investigadores del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN, que incluyen a los doctores, Bibiana Chávez, Raúl Argüello, Cecilia Montañéz y Guadalupe Ortega-Pierres. Asimismo, participaron en este trabajo los doctores Gabriel López, del Instituto Nacional de Pediatría de la Secretaria de Salud, y Adrian Hehl, del Instituto de Parasitología de la Universidad de Zurich, en Suiza.
Considero que es muy importante el reconocimiento a nuestra labor de investigación, que en México requiere de un gran esfuerzo y dedicación.
Guadalupe Ortega Pierres, investigadora del Cinvestav IPN
N de la R
La nota reproduce un comunicado emitido por la Dirección General de Información de la UNAM.