■ Diez sicoanalistas estudian su vigencia
Reditan en español texto de Freud sobre la moral sexual
En 1908 Sigmund Freud publicó un artículo con un “extravagante título”: La moral sexual cultural y la nerviosidad moderna, donde el autor nombraba “con precisión y arrojo” las características de la vida urbana.
Para analizar los cambios en la vida social y en las formas de sufrimiento mental ocurridos desde entonces, el texto freudiano acaba de ser reditado en español acompañado de 10 artículos de otros tantos sicoanalistas que reflexionan sobre su vigencia en el entorno social contemporáneo.
El título del volumen resultante es todavía más extravagante, y en el cual la “e” de novedad aparece invertida: Cien años de novedad. “La moral sexual ‘cultural’ y la nerviosidad moderna” de Sigmund Freud (1908-2008). Acaba de ser publicado por Siglo XXI Editores y fue presentado hace unos días en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Néstor A. Braunstein, sicoanalista de origen argentino radicado en México desde 1974, y Betty B. Fuks, brasileña, son los coordinadores del libro que aparece simultáneamente en español y portugués.
Alberto Sladogna, Lidia Agazzi, Helí Morales y Braunstein comentaron el libro, moderados por Fernanda Navarra Solares. Resaltaron la vigencia del artículo de Freud, pero establecieron puntos de divergencia en algunos aspectos.
Entre los cambios transcurridos desde 1908, Sladogna destacó, por ejemplo, que “el parricidio dejó de ser el crimen por excelencia. Consideró dignos de estudio desde una perspectiva sicoanalítica fenómenos como la virtualidad a la que ha dado lugar el desarrollo tecnológico y, en especial, la aparición de Internet: una gran fábrica de vidas irrealizables”.
Consideró que “los problemas de Freud con las mujeres, tienen en México un horizonte que nos toca y concierne”: las asesinadas en Ciudad Juárez, “almas en pena que recorren nuestra subjetividad”.
Ninguna de las asesinadas pertenece siquiera a las clases medias: “Eso hay que estudiarlo”.
Los editores, por su parte, señalan que de 1908 a 2008 todo parece haber cambiado, aunque lo que persiste y es constante es “el malestar en la cultura”.