■ Los demócratas piden que 25 mil mdd del paquete de salvamento se canalice a ese sector
Rechaza la Casa Blanca que se destine a automotrices parte del rescate financiero
■ La canciller alemana informó que convocó a una reunión con Opel para definir cómo ayudarla
Ampliar la imagen Oficinas generales de Opel, filial de General Motors, en Ruesselsheim, Alemania Foto: Reuters
Washington, 15 de noviembre. La Casa Blanca se opuso firmemente este sábado a que el plan de rescate por 700 mil mil
Ante la proximidad de una semana en la que los demócratas podrían proponer una ayuda de emergencia de 25 mil millones de dólares para los fabricantes de automóviles en plena depresión, la vocera de la Casa Blanca, Dana Perino, afirmó que ese dinero debía proceder de fondos especialmente atribuidos al sector por el Congreso en septiembre, y no del plan de rescate de 700 mil millones lanzado en octubre.
Los demócratas, mayoritarios en el Congreso, querían sacar 25 mil millones de dólares del plan de rescate además de los 25 mil millones en préstamos ya destinados a los constructores de automóviles en septiembre.
Pero la Casa Blanca y los republicanos en el Congreso se negaron hasta ahora. Aunque en minoría, los republicanos parecen poder hacer abortar el proyecto al Congreso si éste se debatiese la próxima semana.
La vocera del presidente George W. Bush indicó sin embargo la voluntad del gobierno de llegar a un acuerdo.
El gobierno estadunidense quiere ver al Congreso adoptar la semana próxima una ley “que utiliza los fondos existentes y destinados a ayudar a los constructores automotores a convertirse en viables a largo plazo”, dijo Perino.
Los 25 mil millones de dólares aprobados en septiembre deben servir a los constructores para adaptar su producción a las nuevas realidades del mercado. El desbloqueo de los préstamos está sin embargo condicionado a la seguridad de que los beneficiarios son viables y que el dinero no es entregado a pérdidas.
Pero “debemos guardar el dinero del plan para aquello a lo que se supone debe servir: estabilizar y reforzar nuestro sistema financiero”, afirmó Perino.
Mientras tanto, la canciller alemana, Angela Merkel, dijo este sábado en Washington que convocó a una reunión para el lunes con los directivos de Opel, filial de la estadunidense General Motors, a fin de buscar la forma de ayudar al fabricante de automóviles alemán.
“Invité al responsable alemán, al responsable de Europa y al representante de los sindicatos para que podamos discutir la situación de Opel el lunes”, declaró Merkel a la prensa antes de participar en la reunión de líderes de las potencias industrializadas y emergentes del G-20.
“El gobierno federal, el ministro de Economía y el ministro de Finanzas toman este asunto a su cargo”, destacó, agregando que ella misma examinaría paso a paso la forma de ayudar a Opel.
Opel es una filial en dificultades de la estadunidense General Motors, que a su vez está en serios problemas financieros.