■ Llegará al Eje 5 Poniente; se busca favorecer a residentes de la parte alta de la demarcación

Anuncia Ebrard ampliación de la línea 12 hasta la delegación Álvaro Obregón

■ Ejidatarios inconformes presentan queja ante la CDHDF por amenazas de granaderos

Ángel Bolaños, Alejandro Cruz y Agustín Salgado

El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, anunció anoche que el proyecto de la línea 12 del Metro se ampliará un kilómetro y medio a partir de la estación Mixcoac, para cruzar Periférico y llegar a la altura de Eje 5 Poniente, a fin de acercarlo a la población que habita en las partes altas de la delegación Álvaro Obregón.

“Ya es parte del proyecto, ya está presupuestado”, afirmó el mandatario capitalino en entrevista al concluir el acto en el que puso la primera piedra de un centro de desarrollo comunitario en la colonia Jalalpa de dicha demarcación, donde dijo: “hemos tomado la decisión de que la Línea 12 del Metro –que empieza en Mixcoac y estaba proyectada con terminal en Tláhuac, pasando por Coyoacán, Benito Juárez e Iztapalapa–, la vamos a prolongar para atravesar el Periférico, de este lado, que es donde está la gente, les quiero avisar que así va a ser, lo vamos a inaugurar para fines de 2011, que terminemos toda la obra”.

Luego, en breve entrevista, precisó que el trazo de ésta se ampliará en línea recta aproximadamente 1.5 kilómetros, por lo que ya no será Mixcoac la estación terminal, sino otra cuyo nombre y ubicación determinará con el delegado Leonel Luna Estrada, “llega más o menos a donde está el Eje 5 (Poniente)”.

En tanto, ejidatarios de San Francisco Tlaltenco, en la delegación Tláhuac, que se oponen a esta obra, presentaron una queja ante la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) por presuntas amenazas de granaderos contra un habitante del predio Terromotitla, Antonio Santiago, quien permanece en su vivienda desde la expropiación porque le dijeron que “si sale, ya no regresa”.

Según la queja, Santiago declaró que no está dispuesto a vender sus tierras “porque no tiene a donde ir”, además de que no quiere abandonar sus propiedades y aunque le dicen que le ofrecen un cheque por 200 mil pesos, hasta el momento no “ha recibido nada”.

Los peticionarios señalaron que en esta misma situación se encuentran alrededor de 30 personas más, por lo que personal de la CDHDF se trasladó al lugar para hacer una inspección ocular y comenzar la investigación respectiva, además de que lograron que se dieran garantías a los afectados de salir de sus viviendas y regresar a ellas.

La tensión en el ejido continuó ayer, cuando personal del Sistema de Transporte Colectivo (STC), encabezados por José Franco, quien se identificó como funcionario de concertación del organismo, acompañados por elementos de la policía montada, pretendieron en tres ocasiones tomar posesión de aproximadamente dos hectáreas que aseguran forman parte de Terromotitla.

La acción provocó enfrentamientos verbales, y de acuerdo con fuentes del Metro, los hechos ocurrieron porque hay posesionarios que están de acuerdo en vender y aseguran que dichas tierras forman parte del predio expropiado; lo cual negaron los inconformes, aduciendo que Terromotitla termina donde empieza el canal Acalote, al norte del predio.

El personal del SCT y la fuerza pública se replegaron y será por la vía jurídica que definirán los límites del paraje, en tanto, los ejidatarios presentaron una denuncia ante el Ministerio Público por invasión de propiedad.

Por su parte, el director del Metro, Francisco Bojórquez, reiteró que el gobierno se mantiene abierto al diálogo con los afectados por la expropiación.

Entrevistado luego de inaugurar la exposición Voces de las luces, en la estación Pino Suárez del Metro, el funcionario dijo que “no hay riesgo de que se desborde la violencia. Estamos abiertos al diálogo y los estamos buscando para conversar. Ya hemos hecho contacto y queremos volver a tenerlo”.

“Les soy franco –agregó–, no veo un gran rechazo a la línea 12 porque todo el mundo sabe, y ellos también, que es un beneficio verdadero para todo el pueblo de Tláhuac e Iztapalapa y en general para toda la ciudad.

“Queremos privilegiar el diálogo, somos pacíficos, somos gente buena y somos de izquierda, por lo que dialogamos sin ninguna confrontación”, apuntó.