■ Miles de personas fueron estafadas mediante una “pirámide”
Un funcionario asesinado, una de las consecuencias de fraude en Colombia
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Personas hacen filas frente a las oficinas de la agencia financiera DMG en Bogotá. Miles de colombianos perdieron sus ahorros atraídos con la promesa de recibir rendimientos hasta de 150 por ciento
Foto: Reuters
Bogotá, 13 de noviembre. Un funcionario de la alcaldía de un pueblo ubicado al sur de Colombia fue asesinado por enfurecidos inversionistas que buscaban recuperar sus ahorros, después de que el gobierno intervino una empresa de captación en medio de un millonario fraude, informó la policía.
El crimen del funcionario fue el epílogo de una jornada de desórdenes y saqueos de oficinas de captación conocidas como “pirámides”, a la que miles de personas llevaron sus ahorros en los últimos meses atraídos por la oferta de rendimientos hasta de 150 por ciento. Algunos de los estafados hipotecaron sus casas, vendieron vehículos o depositaron los ahorros de toda la vida con la ilusión de duplicar su capital en pocos meses. Aunque no existen cifras oficiales sobre las estafas, el gobierno estima que funcionan en el país más de 200 empresas de captación de dinero.
El presidente colombiano, Álvaro Uribe, reconoció que por diferentes discusiones jurídicas no hubo antes acciones para evitar la proliferación de las captadoras de dinero ilegal, conocidas como “pirámides”, que generaron por segundo día alteraciones en el orden público en el país.
“Es una lástima que toda la discusión jurídica nos lleve a una intervención tardía. El gobierno lo reconoce, pero haremos todo el esfuerzo para erradicar definitivamente estas practicas que tanto daño le hacen a la patria”, afirmó el presidente.
Se trata de la primera víctima en medio de las protestas en decenas de ciudades y pueblos del país sudamericano, donde las autoridades se vieron obligadas el miércoles a declarar el toque de queda para evitar desórdenes y saqueos. Al parecer, algunos de los enfurecidos ahorristas creyeron que el funcionario intentaba huir de la oficina captadora con dinero y le dispararon en la cabeza, dijeron las autoridades.
El asesinato del funcionario del municipio de Buesaco, Byron Santander, se produjo la noche del miércoles en esa población del departamento de Nariño, horas después de que el gobierno ordenó intervenir una firma de captación con 66 oficinas en 12 de los 32 departamentos de Colombia.
La Policía Nacional informó que el funcionario trataba de mediar entre los empleados de la oficina captadora de dinero y un grupo de inversionistas.