■ La Junta de Coordinación Política del Senado acordó poner a debate el tema de las Afore
Analizarán pérdida en fondos para el retiro
El Senado de la República decidió entrar de lleno a resolver el problema de las administradoras de fondos para el retiro (Afore), ya que mientras los ahorros de los trabajadores disminuyen día a día, las ganancias de esas empresas se elevan.
Ayer, la Junta de Coordinación Política acordó poner el tema a debate nacional a partir del próximo martes, ya que de enero de 2007 a septiembre de este año las pérdidas de los fondos que administran las Afore ascendió a más de 64 mil millones de pesos, toda vez que las administradoras aumentaron en 247 por ciento en promedio las comisiones que cobran por manejar el dinero de los trabajadores.
Tan sólo dos Afore: Copel y Ahorra Ahora, tuvieron incrementos superiores a mil por ciento. Durante la reunión de la Junta de Coordinación Política, que preside Manlio Fabio Beltrones, se informó también que desde 1997 y al cierre de septiembre de este año, las ganancias de las administradoras fueron de más de 121 mil millones de pesos.
“Parece que estamos frente a un robo hormiga, pero monumental, donde hay una transferencia de recursos que son de los trabajadores a empresas privadas, vía las comisiones de las Afore”, resaltó el coordinador perredista Carlos Navarrete.
Entrevistado después de la reunión de ese órgano directivo, dijo que el Senado está obligado a entrar en ese tema ya que no puede permitirse que se sigan esquilmando los recursos destinados a las pensiones de los trabajadores mexicanos.
La Junta acordó abrir un debate nacional, dada la proporción del problema, que involucra a la fuerza de trabajo mexicana.
Por otra parte, durante la sesión de ayer del Senado, el panista Gustavo Madero presentó una iniciativa para reformar la ley del mercado de
En la iniciativa se establece la exigencia de que las empresas emisoras indiquen sus posiciones en instrumentos financieros derivados.
Madero expuso la urgencia de que el Congreso fortalezca la regulación del sector financiero a fin de evitar el alto riesgo por la combinación de prácticas irresponsables y poco éticas, lo que no sólo afecta a las empresas, sino también a sus socios comerciales e inversionistas.