■ Honran al escritor con un maratón de lectura de sus poemas en el centro Donceles 66
La poesía resiste el vendaval por ser el único arte fuera del mercado, dice JEP
■ Celebra “la magnífica poética joven de México, que no tiene presencia pero merece difusión”
En el contexto del homenaje popular que José Emilio Pacheco (JEP) recibió ayer en el Centro Histórico, el escritor dijo: “La poesía es un acto de resistencia contra el horror que nos rodea y nos llega cada vez más cerca. La poesía no puede silenciar los cuernos del chivo ni detener la quiebra de las trasnacionales con el hecho brutal de que cada día se arrojan miles de personas al desempleo y a la desesperación, lo que sí logra es darnos plena conciencia de estar vivos”.
En el Centro Cultural Donceles 66, JEP consideró que ante la crisis económica en México y el mundo, “la poesía ha resistido al vendaval, porque es la única de las artes que está fuera del mercado”.
Explicó que los poetas no pretenden ser ricos ni famosos y no tendrán público, pero a cambio cuentan con lectores, “que me atrevo a suponer son en primer término lectoras”.
El autor de Batallas en el desierto indicó que hace un mes no se hubiera imaginado la devaluación del peso ni el incremento de las matanzas en el país. “Creo que a todos nos preocupa mucho la situación porque de eso depende nuestra vida y nuestro futuro”.
Pacheco agradeció el homenaje y señaló que el maratón de poesía de 30 horas, que se inició ayer a las dos de la tarde, demuestra que existe una “magnífica poética joven de México que no tiene presencia y merece difusión.
“Se dice –agregó– que con el triunfo de Obama comienza de verdad el siglo XXI; tal vez sea posible afirmar que hoy, con este acto, empieza simbólicamente, pero de verdad, la nueva poesía mexicana del siglo XXI.”
Pacheco expresó preocupación por las nuevas generaciones de autores que deberán enfrentar la piratería: “Agradezco a los piratas que elijan mis libros, pero destrozan a la editorial y el crecimiento de los jóvenes, porque cada libro pirata es un poeta joven menos”.
El poeta, quien asistió acompañado por su esposa, Cristina Pacheco, aseguró que el maratón de poesía ha sido “el mejor de los reconocimientos posibles. Gracias a todo el equipo que ha hecho de Donceles un espacio cultural ya indispensable”.
Emocionado al ver la participación de los jóvenes en el encuentro poético, expresó: “No quiero más, no pido más, no pretendo más. Me doy por satisfecho con el acto que se ha realizado este miércoles para recordar el medio siglo de mi primer libro (La sangre de medusa y otros cuentos marginales) y los 70 años que cumpliré el año próximo”.
El autor, quien no ha dejado de escribir, dijo que tiene tres libros sin publicar, pero ante la crisis duda que puedan editarse. El primero se titula Los días que no se nombran; el segundo, Todo se va, pero existe un texto de una joven cubana que lleva por título Todos se van, así que lo cambiará. El tercero recopila versiones poéticas que ha realizado a lo largo de varios años.
Con motivo del Día Nacional del Libro, el poeta obsequió 11 ejemplares del volumen Escenarios, con obra de Vicente Rojo y poemas de su autoría, que nunca circuló comercialmente y tiene valor simbólico.
El maratón se inició con la lectura de Pacheco de los poemas Literatura y realidad, De las guerras perdidas, La hora de los niños, El péndulo, Simulacro y El mañana.
Después de su participación, firmó algunos libros a sus lectores, mientras los poetas –en su mayoría jóvenes– continuaron con la lectura de poemas de JEP que hablan del petróleo, el tiempo, el amor y lo oscuro de la vida.
El homenaje al poeta fue coordinado por Francisco Vargas, quien adelantó que en 2009 el maratón de poesía será dedicado a Jaime Sabines.
En el maratón, que finalizará el viernes, participan 192 personas, como Miguel León-Portilla, y Adolfo Castañón, entre otros.