■ Nuevas Voces de la Literatura Mexicana, en Bellas Artes
Los temas nacionales en la literatura, a la baja, afirma Mario González Suárez
Las temáticas de los jóvenes escritores actualmente giran en torno a cuestiones más personales, ya sea con carácter intimista o familiar, como la exploración de lo imaginario”, consideró el escritor Mario González Suárez, encargado de presentar a los jóvenes autores que participaron ayer en el ciclo Nuevas Voces de la Literatura Mexicana, que se realizó, en la sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes.
En los años recientes ha cambiado mucho la manera de los jóvenes autores para acercarse a la literatura. “Hoy día la cuestión del tema no es el asunto más importante del fenómeno literario; el tema es un asunto que interesa mucho más a las editoriales comerciales”, comentó en entrevista González Suárez, minutos antes de iniciar la lectura de textos.
“Los temas nacionales han ido a la baja desde hace varios años; para la generación de escritores, hoy mayores de 35 años, como la mía, hubo un olvido, consciente y voluntario de aquellos temas caballito de batalla de la narrativa mexicana, que siguen siendo hasta la fecha, como la Revolución Mexicana. Hoy el interés de los jóvenes autores se centra en asuntos más personales, intimistas o familiares, o en la exploración de lo imaginario.
“Sin embargo –explicó–, leer el propio trabajo como un escritor que apenas empieza a forjarse una trayectoria, es parte del camino que todo autor realiza de una u otra manera.”
Acto apresurado
Para algunos, tal oportunidad se presenta con el ciclo Nuevas Voces de la Literatura Mexicana.
El programa tiene una dinámica muy sencilla: los jóvenes escritores participantes leen en poco más de 10 minutos parte de su trabajo.
Este pasado domingo se llevó a cabo la quinta lectura de textos, con la participación de los poetas Diego José (ciudad de México, 1973); Nadia Mondragón (ciudad de México, 1979), y los dramaturgos Martín López Brie (Buenos Aires, 1975), quien desde los cinco años vive en el Distrito Federal, y Hugo Alfredo Hinojosa (Tijuana, 1977).
A diferencia de las primeras mesas, en esta ocasión, al término de la lectura de textos no hubo diálogo entre los jóvenes autores y el público asistente, ni los escritores comentaron sus intereses o registros literarios, lo que ayudaría a conocer un poco más a los narradores o poetas.
El acto se limitó a una apresurada lectura de una mínima parte del trabajo de los autores, para luego, sin más, dar por terminado el encuentro.