Camión despeñado en Oaxaca operaba sin permisos
Oaxaca, Oax., 8 de noviembre. Telésforo Antonio Jarquín, chofer de la camioneta que cayó a un barranco de más de 60 metros, donde murieron 18 indígenas zapotecos de comunidades del municipio de Santa Lucía, distrito de Miahuatlán de Porfirio Díaz, se encontraba en “segundo periodo de ebriedad”, informó el procurador de Justicia del estado, Evencio Nicolás Martínez Ramírez.
Las pruebas químicas aplicadas a la sangre durante la autopsia confirmaron las versiones que testigos dieron al agente del Ministerio Público de Miahuatlán de Porfirio Díaz, Alberto Melgar Cruz, de que el chofer había ingerido bebidas alcohólicas la noche anterior al viaje.
“Es un contratista, tiene obras (en construcción) en la población y cuando regresa a Miahuatlán nos da aventón, pero ahora estaba borracho”, dijo un poblador de La Chinilla, de donde procedían varios de los muertos.
Según el parte informativo del delegado de Tránsito del estado en Miahuatlán, Fermín Sanjuan Chincoya, la camioneta modelo 1979 también se encontraba en malas condiciones y carecía de permisos para hacer el transporte público de pasaje, además de las pésimas condiciones del camino.
El edil de Santa Lucía, Lucio Benito Cruz, dijo que las víctimas y lesionados de las comunidades de La Chinilla, El Carrizal y La Cofradía se trasladaban a la cabecera municipal a hacer compras al mercado y a recoger recibir apoyos económicos, despensas y consultas médicas otorgadas por el gobierno estatal.
La volcadura ocurrió alrededor de las 6 horas el viernes en las inmediaciones del paraje Arroyo Oscuro, a unos cinco kilómetros de la cabecera municipal, cuando el vehículo Ford 750, placas de circulación RU-28064 del estado, había salido de La Chinilla y se dirigía a la cabecera municipal a dejar a sus 23 ocupantes.