■ Argumenta que le permitirá cumplir sus compromisos de infraestructura y servicios
Formaliza el GDF concesión a la IP de los paraderos de autobuses
■ Publica en la Gaceta Oficial la Declaratoria de Necesidad, mediante el esquema de coinversión
■ Estos espacios significan un medio alternativo para la obtención de recursos adicionales, señala
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El jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, señaló que no se ha podido detener el deterioro de los paraderos
Foto: Carlos Ramos Mamahua
A pesar de los recursos que se han invertido en los llamados centros de Transferencia Modal (Cetram), no se ha logrado el objetivo de mejorar sus condiciones de operación y deterioro en el que se encuentran, así como un mejor control del comercio informal, señaló el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, al justificar la Declaratoria de Necesidad para otorgar en concesión dichos espacios, con un esquema de coinversión, a la iniciativa privada.
Con esto, señala el documento publicado ayer en la Gaceta Oficial, “permitirá al gobierno cumplir sus compromisos de infraestructura básica, servicios auxiliares, equipamiento e instalaciones sin tener que utilizar recursos económicos, que pueden destinarse a otras áreas prioritarias para el desarrollo de la ciudad”.
Al declarar los Cetram como “áreas con potencial comercial (APC)”, para usos públicos y privados y “áreas de transferencia modal (ATM)” para maniobras de vehículos, ascenso y descenso de usuarios de transporte público, advierte que significan “un medio alternativo para conseguir recursos adicionales”, mediante la explotación y aprovechamiento de los inmuebles propiedad del Distrito Federal.
Por ello la determinación de concesionar la operación, administración y explotación de la infraestructura que se desarrolle en los Cetram de El Rosario, Martín Carrera, Zaragoza y Politécnico a los empresarios Carlos Slim, José Chedraui, David Segur y Moisés Saba, respectivamente, que invertirán más de 340 millones de dólares en las obras de rehabilitación y modernización, mismas que registran a la fecha un retraso de dos meses.
Dichas concesiones corresponderán a los esquemas previstos en la legislación vigente, a fin de mejorar las condiciones de seguridad y movilidad, para más de 16 millones de tramos-viajes que se realizan al día en los 45 paraderos existentes en la ciudad de México.
De esta manera se ampliarán las oportunidades de negocios y el desarrollo a partir de proyectos urbanos de amplio impacto; se logrará hacer del transporte público la forma más rápida, cómoda y segura para trasladarse a los lugares de trabajo, escolares o de entretenimiento; y mantener en condiciones óptimas los niveles de servicio de la red vial, señaló.
Ebrard determinó que sea la Oficialía Mayor, en su carácter de dependencia auxiliar del Ejecutivo local, encargarse del proceso de otorgamiento de la concesión, regulación, supervisión y vigilancia de la misma en los términos que dispone la Ley del Régimen Patrimonial y del Servicio Público, a fin de atraer inversiones que permitan la provisión de infraestructura, equipamiento e instalaciones, sin cargo a recursos presupuestales.
La participación del gobierno de la ciudad en la concesión es mediante la aportación de los derechos sobre bienes inmuebles de dominio público o privado por medio de alguna de las figuras que aprobó recientemente la Asamblea Legislativa al reformar la Ley del Régimen Patrimonial y del Servicio Público, como la construcción o explotación o ambas, de proyectos de coinversión o de prestación de servicios a largo plazo.