■ Recomienda buscar nuevos nichos de mercado y elaborar productos novedosos

Advierte la Cepal que México será de los países más perjudicados en AL por la crisis

■ Subraya que es prioritario diversificar el destino de las exportaciones, para evitar dependencia

Erika Duarte

México será de los países en América Latina que más impactos negativos enfrentará por la recesión en Estados Unidos, porque el mercado estadunidense es el principal destino de las exportaciones mexicanas y el principal emisor de inversión extranjera directa (IED), advirtió Jorge Máttar, director adjunto de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

El funcionario señaló que se vienen meses de lento crecimiento, dificultad en la creación de empleos y, en el caso de nuestro país, a un ritmo menor del nivel que se requiere, que son alrededor de un millón 300 mil al año, para emplear a los profesionistas que requieren incorporarse al mercado laboral, a lo que se suma la demanda de los trabajadores inmigrantes que comienzan a regresar a nuestro país. “No tengo idea si son miles o millones o decenas, pero van a volver y eso representará una presión extra sobre el mercado de trabajo”, agregó el funcionario.

Reiteró que México es de los países que tendrá menor crecimiento en Latinoamérica en 2008 y 2009, justamente por su estrecha relación con la economía de Estados Unidos. La desaceleración económica mundial va a reflejarse en la disminución de los flujos de comercio internacional y como México está muy vinculado a Estados Unidos, tendrá que buscar una mayor diversificación de sus exportaciones.

Productividad, estancada

“El resto de los países de la región no tiene una relación tan deficitaria como México”. En Sudamérica existe un comercio más diversificado, mercados más fuertes en Europa, Asia y China, y también las fuentes de IED son más diversificadas, explicó el funcionario y consideró que a nuestro país “le está costando cada vez más competir en los mercados internacionales, porque “su productividad no ha aumentado como debería o la de otros países aumenta más”, dijo en entrevista y agregó que nuestro país ha perdido competitividad.

“El segundo problema es que todavía las relaciones económicas internacionales de México están muy concentradas en Estados Unidos, cuando a este país le sucede lo de ahora, México de inmediato siente el efecto porque hay una vinculación muy estrecha. La evolución de la producción manufacturera de Estados Unidos frente a la de México y a sus exportaciones son casi idénticas porque México le envía 80 por ciento de sus exportaciones. Esos problemas estructurales no se van a resolver pronto, pero hay que empezar a trabajar ya”, indicó.

Sobre los factores que permitirán a México salir adelante de esta situación, el funcionario dijo que “no hay mucho que hacer en cuanto a algunos sectores que pudieran aparecer como los más dinámicos. México seguirá con una estructura exportadora concentrada en las manufacturas –lo cual está bien–, pero la desaceleración mundial, y la de Estados Unidos en particular, va a tener un impacto en las exportaciones manufactureras en México”, a lo que se sumará la reducción por las exportaciones petroleras, debido a la disminución del precio y la demanda.

“Desde mi punto de vista (para mejorar la competitividad), debería incluirse un análisis de nuevos nichos de mercado, de nuevos productos que pueden ser dinámicos en el comercio internacional y en los cuales México puede insertarse favorablemente”.

A la fecha, expuso Máttar, las cifras revelan una caída en la tasa de crecimiento de las exportaciones de México a Estados Unidos, por lo que ahí hay una oportunidad para fortalecer su inserción externa en otras regiones, puede ser América Latina, donde tiene muchos tratados de libre comercio con varios países.

Otras de las opciones son Europa y Asia, particularmente China, que son mercados muy atractivos, y México tiene una relación comercial muy inequitativa y un déficit comercial muy grande con China. Aunque sabemos que no es fácil exportar a ese país, podría ser uno de los mercados, porque aunque también se va a desacelerar, como todo el mundo, se parte que de un crecimiento de 11 por ciento, podría bajar a 8 o 7 por ciento, que todavía es muy alto y sigue siendo un mercado muy dinámico, señaló el representante de la Cepal.

Sin embargo, en materia de otros indicadores, como inflación, Máttar destacó que México es el país que tiene el nivel más bajo en Latinoamérica, “cosa que no es menor”, subrayó, porque en toda la región buena parte de la inflación en este año se explica por los incrementos en los precios de los alimentos. Ante un elemento tan primordial, “los principales afectados son los pobres, porque gastan la mayor parte de su ingreso en alimentos”. Eso es importante destacar. Otros países como Venezuela tienen una inflación de alrededor de 30 por ciento, y en otros el nivel también anda en dos dígitos, indicó.