■ El presidente Fernando Lugo busca rehacer relaciones con México
Rivera critica “atrocidades” de dictadura que azotó Paraguay
Ampliar la imagen El mandatario paraguayo, Fernando Lugo, acudió a misa en la Catedral Metropolitana Foto: Víctor Camacho
La víspera de su visita oficial de dos días a México, el presidente de Paraguay, Fernando Lugo, acudió a la misa celebrada por el cardenal Norberto Rivera en la Catedral Metropolitana, además de recorrer el Palacio Nacional.
Tras hacer un breve recorrido por el recinto religioso y firmar el libro de visitas distinguidas, el también obispo católico con dispensa expresó la voluntad de su gobierno para “consolidar, rehacer” las relaciones diplomáticas, comerciales y políticas con México, ahora que Paraguay vive un “tiempo diferente y de cambio”.
Momentos antes, desde el altar, en las últimas palabras de la misa, el cardenal Rivera se refirió de manera amable al mandatario, dándole la bienvenida.
“Paraguay vive ahora un momento de esperanza, luego de un régimen que parecía no tener fin”, señaló el arzobispo primado de México, en referencia implícita a los 61 años del Partido Colorado en el poder, 35 bajo la dictadura de Alfredo Stroessner.
Tras la misa de mediodía, sin ningún protocolo y de forma “muy afectuosa”, Rivera y Lugo –quien junto con toda su comitiva comulgó durante la misa– conversaron durante unos 15 minutos en la sacristía de la Catedral.
La reunión “parecía entre hermanos”, afirmaron algunos testigos del encuentro, al que no tuvo acceso la prensa.
Ambos personajes hablaron de su coincidencia en estadía en Roma cuando eran estudiantes, en la época del Concilio Vaticano II –en la década de los sesentas– y, aunque no se conocieron en ese momento, se refirieron a la gran expectación que se generó entonces en la Iglesia. Rivera señaló que como estudiantes latinoamericanos seguían “de cerca las atrocidades” cometidas por la dictadura militar en Paraguay.
Otro tema fueron las consecuencias que traerá la crisis financiera global a los pueblos de ambas naciones. Lugo recordó que Paraguay recibe fondos importantes por concepto de remesas, cuya disminución afectará de manera sensible la economía nacional.
Finalmente, Lugo expresó su “admiración” por la riqueza artística, cultural e histórica de México. En su breve mensaje, durante el cual no aceptó preguntas, recordó que su país vive un “tiempo diferente”, por lo que expresó la disposición de su gobierno para abrir relaciones con todas las naciones, en especial las del continente americano.