■ Significaría un ahorro de casi 10 mil millones de dólares, afirma el instituto
Disponibilidad nacional de gasolina UBA evitaría muertes prematuras y enfermedades, dice el INE
■ Con ese dinero podría construirse una refinería pequeña para producir el combustible, agrega
Ampliar la imagen Millones de mexicanos están expuestos a la contaminación ambiental en el valle de México, las ciudades de Guadalajara, Monterrey, Juárez y Toluca, la cual se origina principalmente por los vehículos automotores Foto: Archivo La Jornada
La disponibilidad de gasolina con contenido ultrabajo en azufre (UBA) a escala nacional evitaría 17 mil casos de muertes prematuras, más de 58 mil casos de bronquitis crónica y otras enfermedades, lo que equivaldría a un ahorro para el país de casi 10 mil millones de dólares. En cambio, a causa del incumplimiento de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 086 sobre las especificaciones de combustibles, en particular de diesel, en las siguientes dos décadas se dejarán de tener beneficios sociales, que en dinero significan 4 mil millones de dólares, afirmó Leonora Rojas Bracho, directora general de Investigación sobre la Contaminación Urbana y Regional del Instituto Nacional de Ecología (INE).
Con esta última cantidad se podría construir una refinería pequeña o reconfigurar alguna otra para producir gasolina en el país, explicó Adrián Fernández, presidente del organismo. Destacó que este tema forma parte de los grandes retos que enfrenta México en materia ambiental, por la creciente necesidad de movilización de la población y la expansión de las ciudades.
Otros asuntos pendientes tienen que ver con el creciente aumento de la flota vehicular y la próxima apertura de la frontera a los vehículos de carga. Al igual que los autos “chocolate”, dijo, son unidades con más de 10 años de antigüedad y altamente contaminantes.
Durante el taller El futuro de la movilidad urbana, los funcionarios resaltaron que la mala calidad del aire persiste en las ciudades, en las que se concentra la mayor parte de la población. Rojas Bracho señaló que 30 millones de mexicanos están expuestos a la contaminación ambiental en el valle de México, las ciudades de Guadalajara, Monterrey, Juárez y Toluca, la cual se origina principalmente por los vehículos automotores.
La especialista comentó que todavía más grave es el hecho de que entre 1996 y 2010 se habrá duplicado el número de unidades de transporte, y de contribuir con 28 por ciento de las emisiones contaminantes en el primer año pasarán a 33.4 por ciento del total en el segundo.
Otros factores que inciden en el fenómeno es el incremento de 1.6 por ciento al año en la movilidad de las personas y la consiguiente demanda de combustibles, cuyo uso aumentará 2.5 veces entre los años 2000 y 2050.
En su exposición, Rojas Bracho comentó sobre la situación de la zona metropolitana del valle de México y resaltó que 24 por ciento de los viajes de los habitantes del estado de México son hacia el Distrito Federal y 17 por ciento a la inversa. Los porcentajes son muy altos y reflejan la falta de planeación en el crecimiento de las ciudades, por lo cual las personas se han visto obligadas a vivir en la periferia aunque sus centros de trabajo se ubiquen en la capital del país.
La deficiencia en el transporte público y el elevado uso del automóvil particular forman parte de una problemática compleja, cuya solución debe ser integral y pasa por garantizar el cumplimiento de la normatividad ambiental, en particular la NOM 086, dijo Rojas Bracho.
Se suponía que para el mes de octubre, Petróleos Mexicanos (Pemex) contaría con una refinería para la producción de diesel de ultrabajo contenido de azufre para los vehículos pesados, de carga y transporte en todo el país. Actualmente, la disposición se cumple sólo en la zona de la frontera norte.
El presidente del INE también se refirió a la próxima apertura de la frontera norte a los vehículos de carga procedentes de Estados Unidos y Canadá, lo cual también implica un gran reto en materia ambiental. Todavía se desconocen sus dimensiones, pero como referencia está la regularización de los automóviles “chocolate”, con los que entre 2005 y 2006 se duplicó el número de automotores en el país. Lo lamentable es que las unidades importadas tienen más de 10 años de antigüedad y se encuentran en los estados de la República donde la verificación vehicular no es obligatoria, indicó Fernández.