■ Señala que destrucción del agro afectará a 70% de la población
Pinta el PRI a la UE trágica situación del campo mexicano
■ La fracción tricolor en San Lázaro se queja del TLCAN
La fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados advirtió que la destrucción de la infraestructura productiva del campo mexicano afectará el consumo de alimentos entre la población más desprotegida del país, cuyo porcentaje alcanza más de 70 por ciento.
“A diferencia de otros países de América Latina, México se ha convertido en un importador neto de alimentos, particularmente de cereales y oleaginosas; el impacto de todo esto se observa en los hogares, lo que se prevé implique serios problemas de desabasto.”
Durante la séptima reunión parlamentaria mixta México-Unión Europea, el diputado Samuel Aguilar, en nombre del PRI, expuso la trágica situación que enfrenta el país a raíz del desmantelamiento sostenido de las actividades productivas en el sector agrícola:
“En México se acabó la industria propiedad de la nación. Uno de los casos paradigmáticos se encuentra en la producción de los fertilizantes, hoy los productores dependen de su importación y de precios cada vez más caros; se cancelaron los programas de asistencia técnica y capacitación dirigidos a los productores rurales.
“Hay que resaltar que el financiamiento se redujo al mínimo, cayendo más de 90 por ciento; se aniquiló la producción nacional de semillas mejoradas, quedando a merced de las grandes empresas trasnacionales; se redujeron al mínimo las actividades de investigación y generación de tecnologías agroalimentarias.”
Con ello la posición priísta manifiesta que por efecto del Tratado de Libre Comercio (TLCAN), el campo mexicano entró en la crisis más aguda de su historia, empujando a su población a la pobreza o a la expulsión masiva a Estados Unidos, donde han emigrado más de tres millones de mexicanos en los últimos tres años, en su mayoría del sector rural.
“A diferencia de otros países en la región de América Latina, México es un importador neto de alimentos y, particularmente de cereales y oleaginosas, productos que han observado el mayor incremento en sus precios en los últimos dos años. El incremento en los precios de los alimentos ha llevado a un deterioro en la balanza comercial agroalimentaria de 2 mil 200 millones de dólares a cuatro mil 200 millones de dólares en el periodo de 2006 a 2007.
“Esto generaría un déficit aproximadamente de 0.6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2008. Cabe señalar que el incremento en los precios de los alimentos ha sido acompañado por un aumento en los precios del petróleo, lo que ha compensado por mucho el deterioro.”
Por otra parte, Beatriz Paredes, presidenta del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, se sumó al respaldo del punto de acuerdo presentado por la diputación federal priísta del sector obrero, con objeto de que la administración de Felipe Calderón implante un efectivo control de precios de los artículos de la canasta básica y así proteger la economía de los trabajadores y sus familias.
Paredes exhortó al sector empresarial a “que asuma una actitud responsable y contribuya a frenar un encarecimiento de los productos de principal consumo entre la población”.
Acompañada de Pedro Salazar, Subsecretario de Acción Política de la CTM, y Eduardo Miranda Ibarra, representante de la CROC, la presidenta del PRI expuso que su partido tiene como propósito fundamental, crear un efectivo y real control de precios a los productos de la canasta básica y que de esta manera no haya especulación y retiquetación.
Incluso refirió que el CEN priísta considera positivo el planteamiento para que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos homologue en una sola zona económica los salarios de los trabajadores del país que tienen percepciones menores.