■ Más de 10 mil jornaleros, acompañados por gobernadores, se reunieron en San Lázaro
Demandan campesinos al gobierno sacar al agro del olvido presupuestal
La Confederación Nacional Campesina (CNC) y los gobernadores de Sinaloa, Aguascalientes, Durango, Zacatecas y Tabasco demandaron a los legisladores y al gobierno federal que “terminen con los vicios y las inercias de dejar a los diputados la tarea de emparejar el presupuesto de los programas de mayor demanda de la sociedad rural”.
El campo no puede seguir en el último sitio de las prioridades de la nación y del presupuesto, asentó la gobernadora de Zacatecas, Amalia García Medina, ante los miles de campesinos –10 mil, según los organizadores– que ayer se concentraron en la explanada principal y el área del helipuerto de la Cámara de Diputados. “Los gobernadores exigimos un presupuesto que no sea asistencialista, sino que impulse la producción, pues es doloroso tener que importar 25 por ciento del maíz que se consume en el país”, destacó.
A sus observaciones se sumaron los gobernadores de Sinaloa, Jesús Aguilar Padilla; Tabasco, Andrés Granier Melo; Durango, Ismael Hernández Deras, y Aguascalientes, Luis Armando Reynoso Femat, quienes insistieron en que las reglas de operación para los programas rurales y la visión federalista en el ejercicio del presupuesto impiden a los gobiernos estatales y municipales cumplir el compromiso de respaldar a los campesinos.
Es inadmisible que los recursos lleguen etiquetados y condicionados a la aportación de los municipios y de los gobiernos de los estados para poderlos aplicarlos a los programas rurales; eso sólo provoca que no se ejerzan los fondos, agregó el titular del gobierno de Durango.
Antes, el presidente de la CNC, Cruz López Aguilar, dijo a los diputados que las crisis “no se administran con diferendos; hace falta la unidad, el oficio parlamentario y la sabiduría para identificar las actividades realmente prioritarias capaces de romper las consecuencias perniciosas de los actuales ciclos de la economía mundial”.
Al insistir en que el presupuesto para el campo no debe ser menor de 260 mil millones de pesos y por eso es inaceptable la asignación de un aumento de apenas 5 por ciento al presupuesto del campo, López Aguilar exigió que al sector agropecuario se le reconozca como “de alta prioridad y de seguridad nacional por sus aportaciones indiscutibles a la paz social”.
Destacó que el paradigma de que el mejor alimento es el más barato fue dinamitado por la cruda realidad, ya que, a partir de la disminución de las reservas internacionales de granos y oleaginosas en el mundo, algunos países empezaron a prohibir la exportación de alimentos, lo cual convirtió “en entelequia el libre comercio”.
Acompañado por los dirigentes de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala, Central Campesina Cardenista, Central Campesina Independiente, Unión General Obrero Campesina de México, Sindicato Mexicano de Electricistas, entre otros integrantes del Movimiento Nacional por la Soberanía Alimentaria y Energética, los Derechos de los Trabajadores y las Libertades Democráticas, el dirigente de la CNC advirtió: “estamos ante un escenario peligroso que, de no comprenderse, podría destruir el avance conseguido con tantos sacrificios en materia social”. Y a manera de ejemplo mencionó que por la “evaporación del sueño americano” podrían regresar un millón 300 mil mexicanos, quienes se sumarán a los 800 mil nuevos actores que demandarán empleo en 2009.
Javier González Garza, coordinador de la fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD), comentó que la discusión del presupuesto para el campo se realiza en la peor crisis financiera; por eso al campo hay que darle prioridad y estar preparados para evitar hambrunas en el país.