■ Incumple NL requisitos de la Semarnat
Detiene Profepa el Arco Vial Sureste
■ Según el coordinador de Proyectos Urbanos del gobierno estatal, es un problema “menor”
Monterrey, NL, 29 de octubre. La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) suspendió la construcción del Arco Vial Sureste porque el gobierno de Nuevo León incumplió diversos requisitos para autorizar el cambio de uso de suelo otorgado por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Abel Guerra Garza, jefe de la Coordinación Estatal de Proyectos Urbanos Estratégicos, responsable del proyecto, consideró que la suspensión es “un problema menor” que será subsanado.
Sin embargo, grupos ambientalistas prevén que el gobierno estatal no podrá corregir las deficiencias señaladas y por ello se debe revocar definitivamente el permiso otorgado por la Semarnat.
La tarde del martes, el director general de Inspección y Vigilancia de la Profepa, Ignacio Millán Tovar, suspendió los trabajos del Arco Vial Sureste, polémico proyecto que incluye un eje carretero de 19.8 kilómetros y un túnel de mil 800 metros que atravesaría la sierra Cerro de la Silla. Organizaciones ambientalistas consideran que con el Arco Vial no se pretende resolver problemas de tránsito, sino facilitar la urbanización de 8 mil hectáreas de reserva ecológica.
Ignacio Millán comentó que con esta medida se pretende “reforzar la política nacional de cero tolerancia a la tala clandestina y detener el deterioro de los recursos naturales”.
Sin ofrecer detalles, “para no afectar el procedimiento”, dijo que el gobierno de Nuevo León tiene 15 días hábiles para impugnar la resolución.
Guerra Garza expuso que a la administración del gobernador Natividad González Parás no le preocupa la medida, porque se trata de una “suspensión temporal”, y que entregará los datos solicitados en el plazo requerido.
Explicó que la Profepa exigió comprobar la propiedad de los terrenos por donde pasaría el eje carretero, cuantificar el volumen forestal afectado y presentar informes trimestrales sobre la obra; sobre este último punto, señaló que no se puede informar de lo que todavía no empieza.
Sin embargo, el biólogo Antonio Hernández Ramírez, quien ha presentado varias denuncias contra Abel Guerra por violaciones a las leyes ambientales en este proyecto, afirmó que el funcionario miente al afirmar que los reportes trimestrales se entregarán después de que las obras se inicien, pues en los dos permisos otorgados por Semarnat se indica que es obligatorio presentar reportes trimestrales y bitácoras de campo previos, durante la operación y luego de la terminación del proyecto.
Asimismo, sostuvo que Guerra Garza miente al decir que la obra no ha empezado, ya que “se posee registro de que hubo personal trabajando en la cañada de Santa Ana desde julio hasta hace unos días. Esto aparece en las denuncias interpuestas ante la Profepa en contra del proyecto”.
Igualmente, dijo Hernández Ramírez, es falso que la información solicitada por la autoridad esté en el expediente entregado a la Semarnat, como señaló Guerra Garza.
Explicó que en el permiso que aprueba el cambio de uso de suelo, se indica que Abel Guerra planteó desforestar 130 mil 721 metros cuadrados, de los cuales solamente comprueba la propiedad de 71 mil 914 metros; es decir, existe una diferencia de 58 mil 800 metros cuadrados, como especificó la Profepa al suspender el proyecto.
Antonio Hernández recordó que la semana próxima vence el plazo fijado por la Semarnat para realizar los desmontes en las condiciones exigidas, y es imposible que las autoridades estatales hagan en una semana lo que no pudieron hacer de mayo a la fecha, por lo que el proyecto deberá revocarse.
Clausuran cabañas en el parque nacional Cumbres
La Profepa también informó que clausuró un predio forestal y varias cabañas en el parque nacional Cumbres de Monterrey, debido a que causaban un acelerado deterioro de la vegetación en la zona, y las obras carecían de autorización para cambio de uso de suelo.
En un comunicado, la dependencia informó que en 150 hectáreas del predio forestal conocido como El Manzano, en el municipio de Santiago, Nuevo León, se encontraron brotes vivos de la plaga del escarabajo descortezador de pinos, lo cual indica un manejo inadecuado del saneamiento forestal.
Añadió que en aproximadamente 12 hectáreas de un predio campestre ubicado en el cerro La Bola, en la comunidad Los Cristales, en Monterrey, se construyeron viviendas, albercas, potreros, caballerizas, campos de golf y de equitación sin autorización de cambio de uso de suelo.