■ Del 30 de octubre al 9 de noviembre, incluye Leonard Cohen: I’m Your Man
Festival de cine abrirá una ventana para mirar aspectos poco conocidos del budismo
Ampliar la imagen Fotograma de la película The Cup (India, 1999), de Khyentse Norbu
Por si alguien dudaba que vivimos en una ciudad multicultural: en estos días uno puede elegir entre ir a ver una película judía, una budista o una cinta aparentemente cristiana, Satanás.
Y es que este jueves arranca el festival de cine budista, que se suma al que está en cartelera, el judío.
Por si fuera poco, los judíos también están representados en el festival de cine budista que se llevará a cabo del 30 de octubre al 9 de noviembre.
En un monasterio esperan ansiosos ver el partido final de la Copa Mundial de futbol. Un monje bön viaja con un fotógrafo estadunidense a una remota región en el oeste del Tibet. El hombre más feliz del mundo participa en investigaciones científicas sobre los efectos de la meditación en el cerebro. En un ritual budista tibetano aprenden a transformarse en Señor de la Danza.
Ficción y documentales
Éstas son algunas de las historias contadas en el Festival Internacional de Cine Budista, que por primera vez ofrece en la ciudad de México un abanico de cintas de ficción y documentales con esa temática. Algunas proyecciones contarán con la presencia del director, y también se llevarán a cabo conferencias y ceremonias.
“Es una gran oportunidad de vislumbrar países poco vistos, culturas extrañas, y saber cómo ven la vida. Nos toca crear puentes; creo que después de estos 10 días algo va a resonar diferente en nosotros”, dijo Leónides Guadarrama, organizador del festival, en conferencia de prensa.
El festival ofrecerá aspectos poco conocidos del budismo, como la historia de un monasterio para monjas en Tibet, que “otorga a las mujeres oportunidades que nunca tuvieron”, contada en Daughters of Wisdom (Estados Unidos, 2008), de Bari Pearlman. Habrá una discusión posterior.
También se proyectará la premiere de Leonard Cohen: I’m Your Man (Estados Unidos, 2005), de Lian Lunson, basada en entrevistas realizadas al poeta canadiense que estuvo cinco años en un monasterio zen.
Asimismo, Travellers and Magicians (Bután, 2003), de Khyentse Norbu –“un maestro tibetano que se dedica al cine”, explicó Guadarrama–, y que es el mismo que dirige The Cup, sobre monjes budistas aficionados al futbol.
Por otro lado, fuera de la selección del festival se presentará Free Tibet (Juan García, 2000), la única producción mexicana. (El país del cual hay más producciones es Estados Unidos.)
Durante esta edición, la ciencia ocupará un lugar central. Lorenzo Cohen, Lama Tenzin Wangyal Rinpoché y Alejandro Chaoul, los tres involucrados en el MD Anderson Cancer Center, participarán en un encuentro en el cual hablarán sobre proyectos de investigación con enfermos de cáncer y darán una práctica con sonido que aplican a pacientes (hay descuento para enfermos de cáncer).
Leónides Guadarrama anunció que “hay un protocolo conjunto del Instituto Nacional de Cancerología y el MD Anderson Cancer Center” para trabajar juntos. El acuerdo se dará a conocer en estos días.
Por otro lado, se llevará a cabo el seminario El poder de los sueños, impartido por Lama Tenzin Wangyal Rimpoché, quien practica la tradición más antigua, el budismo bön.
El cine se crea con fuerzas opuestas: la luz y la oscuridad.
Al respecto, el organizador del festival, opinó: “Así es todo en la vida: sin luz no hay sombra, sin femenino no hay masculino. Sentarte a mirarte, como dice Carl Jung, es reconciliarte con tu propia sombra, con tus demonios; si no reconoces esa sombra tampoco vas a poder ver la luz. Si estás en la luz total, estás ciego; por eso en la introducción al programa hay una cita de Jung: ‘Mirar afuera es soñar, mirar al interior es despertar’”.
El festival es organizado por la Fundación Cultural Samaya Arte para la Paz, asociada con el Instituto Tecnológico de Masachussetts y la Sociedad Fílmica Budista Internacional, y con el apoyo de organizaciones mexicanas, como Garuda Asociación Cultural Tibetana.