■ Cuba celebra 60 años del triunfo del BNC, de la cultura de la isla, expresa Alicia Alonso
La máxima conquista del ballet cubano ha sido crear una escuela, dice historiador
La Habana, 24 de octubre. El Ballet Nacional de Cuba (BNC) necesitó muchos menos de los 60 años que ahora cumple para ser dirigido por la prima ballerina assoluta Alicia Alonso, quien mantiene un lugar propio en el Olimpo de la danza.
A punto de celebrar su redondo aniversario, el historiador del BNC, Miguel Cabrera, reflexiona sobre las aportaciones del ballet cubano a la danza universal.
“En el mundo entero se baila ballet, pero muy pocos han podido lograr la creación de una escuela. Pienso que la escuela cubana de ballet es el más grande aporte que ha hecho el ballet cubano a la cultura universal, porque no solamente es la existencia de una gran compañía ni la presencia de una figura legendaria, como es Alicia Alonso, y una pléyade de luminarias que surgieron en torno a ella, sino que se ha creado la más grande conquista: crear una escuela.”
Esta escuela dancística, prosigue Cabrera, es el resultado de una fusión de elementos que el BNC y sus fundadores Alicia, Fernando y Alberto (Alonso) fueron seleccionando de las escuelas que ellos conocieron y los fueron adecuando al físico cubano, a nuestro temperamento, raíces culturales, idiosincrasia e inclusive hasta a nuestro clima.
Ello, aclara, desde el punto de vista de cómo se asimila la técnica, pero “hay rasgos puramente cubanos, como el respeto irrestricto a las posiciones básicas del ballet académico, ductilidad estilística, la rapidez de las piernas, heredado de los maestros italianos, y el giro, que puede ser lento o rápido.
“Y hay un diálogo entre el bailarín y la bailarina, que es uno de los rasgos que más nos identifican porque hay compañías en las cuales bailarín y bailarina nunca se miran. Aquí siempre hay una conversación entre los bailarines”.
Por ello, hablar de ballet ayer y hoy implica aludir a Alicia Alonso, quien brilló durante décadas en todos los escenarios del mundo y que hoy en día, casi nonagenaria, sigue sin ser capaz de vivir alejada de un teatro.
“El escenario es donde un bailarín debe estar, aunque sólo sea caminando o sentado. Sobre el escenario me siento en casa”, aseguró la fundadora del BNC.
También en el contexto del 60 aniversario del BNC se realizará del 28 de octubre al 6 de noviembre la versión 21 del Festival Internacional de Ballet de La Habana.
“Celebramos 60 años del triunfo del BNC, de la cultura en Cuba y del grito de que estamos vivos y seguiremos con nuestra cultura, nuestro derecho a existir y a ser todos el BNC, parte de la cultura de nuestra patria”, afirmó Alonso.