■ Convoca a asamblea el domingo en el Hemiciclo a Juárez y el martes en San Lázaro
López Obrador pide a los brigadistas vigilar cada contrato que otorgue Pemex
■ “No se hagan ilusiones”, advierte el tabasqueño a empresas privadas del sector energético
Ampliar la imagen Simpatizantes de Andrés Manuel López Obrador, durante el mitin celebrado frente a la Torre del Caballito, donde se realizó la sesión en la que los senadores aprobaron la reforma energética Foto: Carlos Ramos Mamahua
Andrés Manuel López Obrador advirtió que la lucha por la reforma energética aún no termina; “falta todavía bastante”. Convocó a asamblea informativa para el próximo domingo y para el martes frente a la Cámara de Diputados, cuando el pleno revise las enmiendas aprobadas por el Senado de la República.
Señaló ante brigadistas defensores del petróleo que si los diputados modifican “una sola coma, una palabra” en la redacción de las leyes aprobadas, sería suficiente para regresar el paquete a la cámara de origen, y envió un mensaje a las empresas privadas del sector energético: “No se hagan ilusiones, ante cualquier circunstancia no (cuenta) sólo lo que decidan estos vendidos, sino lo que decidamos nosotros, el pueblo”.
Durante un mitin realizado frente a la Torre del Caballito, donde se realizó la sesión de la Cámara de Senadores, el ex candidato presidencial explicó que, no obstante lo aprobado por mayoría, el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo obtuvo un triunfo al poner al descubierto la “trampa para entregar parte de nuestro territorio, aguas y tierras a empresas extranjeras que se encargan de la exploración y explotación del petróleo”. Por eso, sostuvo, “vamos hacia adelante. Es muy importante lo que se ganó hoy, es un verdadero triunfo”.
Minutos después de que concluyó la sesión en que se aprobó la reforma energética, López Obrador enfocó sus críticas hacia los senadores que votaron a favor: “No dejan de ser títeres, se dicen representantes populares, pero son como mayordomos de los potentados; son muy mañosos y aparentemente eran muy difíciles de pillar, de agarrarlos con las manos en la masa”.
Seguramente, indicó, consultaron a gente fuera del país y dijeron “esto no, por ningún motivo, por ningún motivo”, en referencia a la exigencia de incluir 12 palabras en el artículo 60 de la ley del petróleo que aseguren el dominio de la nación sobre el hidrocarburo y se garantice que no se suscribirán contratos de exploración o producción que incluyan el otorgamiento de bloques o áreas exclusivas.
Ensuciaron, dijo, “la memoria de Belisario Domínguez al venir hasta la Torre del Caballito para sesionar y hacer su chanchullo” en una sede que ¡no es el Senado!” Aquí improvisaron un salón donde se encontraba, dijo, el secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, cuya presencia, afirmó, hizo que senadores del Frente Amplio Progresista no tomaran la tribuna “¡porque los iban a golpear! ¡Llevaban la decisión de golpear!”
Indicó que el movimiento aún tiene mucha fuerza “y mucho camino por delante. En este momento los políticos ya se fueron a los restaurantes a celebrar y a brindar con buen vino para decir ‘lo logramos’, pero espérense, esto todavía no termina”, advirtió ante integrantes de la resistencia civil pacífica.
Consideró que la negativa de los legisladores de PRI y PAN a incluir el enunciado de las 12 palabras es la “prueba”, la “mayor sospecha”, de la pretensión de los legisladores panistas y priístas de llevar el sector a la privatización a corto plazo.
En esa perspectiva, justificó la consulta aplicada la noche del miércoles en el Hemiciclo a Juárez, donde la mayoría de participantes eligió iniciar de inmediato acciones de resistencia civil hasta lograr que se incluyan las demandas pendientes.
“Imagínense que ayer se vota (en el Hemiciclo a Juárez) a favor de la primera opción (referente a aceptar los dictámenes en los términos que finalmente fueron aprobados y continuar luchando para evitar violaciones a la Constitución) y ya (viene) el festejo y todo, y a los seis meses le entregan miles de kilómetros cuadrados a (la empresa española) Repsol en tierra, aguas someras, aguas profundas.”
Y otros “miles de kilómetros cuadrados en la región petrolera a personajes como (Juan Camilo) Mouriño (secretario de Gobernación) o a otras empresas. Imagínense lo que le íbamos a decir al pueblo de México: ‘¿saben qué?, nos equivocamos, nos engañaron, no lo percibimos’”.
Pero ahora, explicó López Obrador a quienes lo acompañaron en las movilizaciones contra la reforma energética, “ya estamos viendo este asunto que se detectó a tiempo y se puso al descubierto”, y pidió a los brigadistas mantenerse informados para evitar confusiones.
Precisó que la decisión de adoptar acciones de resistencia civil no se sustenta en “una necedad o en llevar siempre la contraria”, sino en tomar en cuenta un asunto fundamental que los senadores no quisieron discutir.
El ex jefe de Gobierno del Distrito Federal explicó que si los diputados “tienen la arrogancia de sentirse libres” y deciden “quitarle una coma o una palabra” al paquete aprobado ayer, será suficiente para que éste regrese a la Cámara de Senadores. Entonces, “todavía falta bastante”, subrayó.
Desde el templete instalado frente a la puerta principal de la Torre del Caballito, manifestó que el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo evitará que se autoricen esquemas similares a los que se aplican en la industria eléctrica, porque “ya son otros tiempos, ya se acabó el tiempo de la privatización, y no vamos a permitir nada que signifique entregar los bienes de la nación a particulares, y mucho menos a extranjeros”.
Advirtió que el movimiento opositor a la privatización del sector energético acudirá “las veces que sea necesario” a la Torre de Pemex para estar vigilante de cada uno de los contratos que celebre la paraestatal.
López Obrador afirmó que el movimiento que encabeza seguirá “gobernando desde la sociedad” e insistirá en la transformación de México, en el rescate del país ante la grave situación de crisis en que se encuentra, producto de la pasividad del “gobierno usurpador” de Felipe Calderón, quien “todo el tiempo se la pasa escondido debajo de la cama”.