■ El Consejo Mundial de Boxeo prometió ayuda a sus familiares

Dan en Cuautitlán Izcalli el último adiós al juvenil pugilista Daniel Aguillón

■ Martos quiere sacar de la CBDF a Herrera, acusó Maldonado, promotor de la trágica función

Paula Mónaco Felipe y Juan Manuel Vázquez

Con su retrato y el cinturón de campeón superpluma de la Federación de Boxeo del Caribe, cargado por familiares y jóvenes boxeadores, el féretro de Daniel Aguillón recorrió las calles de la colonia Jorge Jiménez Cantú, de Cuautitlán Izcalli, mientras en oficinas del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) se prometió ayuda para sus deudos.

Cantando bajito, la procesión se trasladó primero hacia la parroquia del Sagrado Niño Jesús, donde se ofreció una misa de cuerpo presente. Ante la contemplación silenciosa de los vecinos que se asomaban a su paso, el cortejo fúnebre regresó al número cuatro de la calle Sinfonía, casa de la familia Aguillón.

El velorio se extendió desde el patio a la calle, donde se instalaron una lona y sillas para recibir a los participantes en el último adiós al pugilista, fallecido el pasado lunes a causa de un edema cerebral tras caer noqueado el miércoles 15 por Alejandro Sanabria, campeón superpluma de la Federación Centroamericana.

Sanabria no estuvo presente porque se encuentra emocionalmente afectado y recibe tratamiento sicológico.

“Está muy sacado de onda y confesó que tiene mucho miedo de volver a pegarle a alguien”, comentó Mauricio Sulaimán, secretario del CMB, e indicó que será evaluado por profesionales, pero necesita apoyo, “porque él no tuvo la culpa de nada”.

Varios cientos de personas llegaron hasta la humilde casa, que fue llenándose con el paso de las horas. En el patio se depositaron numerosas coronas enviadas por familiares, amigos y autoridades; también cubetas con ramos y flores. Adentro, un pequeño altar recordó a Daniel entre veladoras, fotos, una imagen de la Virgen de Guadalupe y sus guantes colgados en la pared.

Desconsolados, los familiares resaltaron que su sorpresiva muerte no cambia el concepto que tenían de él.

“Era un niño al que le gustaba mucho el deporte y estuvo luchando hasta el último momento. Lo apoyamos y estamos orgullosos de que haya hecho lo que quería”, afirmó su madre, Mercedes Ramírez.

“Pienso que murió bien porque su pasión era el boxeo, nada más faltó cumplir su meta, que era ser campeón del mundo”, dijo su hermano Gabriel Román, también púgil en peso gallo, aunque adelantó que dejará el deporte: “es muy bonito, pero no quiero preocupar a mi familia, ahora que siente tanto dolor”.

“Daniel era una gran persona, como padre, como esposo y como boxeador; era excelente”, sintetizó su esposa Yavel López Ruiz, de 21 años, madre de Erik y Fernanda, de tres y dos años, respectivamente.

La joven dijo no haber recibido comunicación oficial alguna sobre apoyos económicos, pero comentó que “sí hacen faltam porque el único respaldo que tenía era el de mi marido”.

Antes, en las oficinas del CMB en la Zona Rosa, Sulaimán anunció que entre las medidas de solidaridad con los deudos de Aguillón está conseguir vivienda para la viuda, becas de estudio para los dos hijos, funciones a beneficio y la creación de una cuenta bancaria para recaudar donativos (Banorte 0590008015, sucursal 2067).

Asimismo, una mensualidad por los próximos dos años, así como canalizar otros recursos del CMB y la aportación del empresario boxístico Fernando Beltrán de mil 500 dólares.

Ricardo Maldonado, promotor de la trágica función, anunció que el 29 de octubre se realizará otra en el foro Scotiabank y toda la taquilla se destinará para apoyar de la familia de Aguillón.

Miembros de la familia pugilística, como Édgar Sosa, campeón mundial minimosca del CMB; Hugo Dianzo, Sergio y Johnny González, y el doctor Horacio Ramírez Mercado, jefe del servicio médico de la Comisión de Box del Distrito Federal (CBDF), asistieron a Cuautitlán Izcalli e hicieron guardia de honor desde temprana hora.

Rafael Herrera, presidente de la comisión capitalina y otros miembros llegaron durante la tarde.

“No debemos satanizar al boxeo, aunque es un deporte de alto riesgo, no hay muchas muertes”, aclaró Sosa al citar que las estadísticas muestran más accidentes en otros deportes y en la vida cotidiana.

Enseguida pidió a representantes y promotores cuidar más a los púgiles. Llamó a “tener las atenciones necesarias y hacer caso de lo que dicen los médicos, que poseen experiencia”.

Esta muerte, ocurrida tras 55 años de no registrarse ninguna en los cuadriláteros de la capital, “nos pone a pensar que hay que tener un poco más de cuidado”, agregó Sergio González, ex boxeador y preparador físico del gimnasio Díaz Mirón.

Refutan a Martos

Durante una reunión convocada por el CMB, Sulaimán y el promotor Maldonado respondieron a las declaraciones que la víspera hizo el doctor Martos contra ese organismo y la CBDF, a los cuales acusó de no proteger la integridad de los peleadores, pero ambos consideraron dichas expresiones “infundadas” e “irresponsables”.

“Es una pena que el doctor Martos utilice un asunto tan grave y delicado como la tragedia de este muchacho para tratar de lastimar a instituciones y a personas, porque está demostrado que la pelea fue más que pareja: fue autorizada por los méritos de ambos peleadores”, dijo Mauricio Sulaimán.

Advirtió que el desafortunado peleador inclusive llegó a igualar el combate, y que de llegar a los 12 asaltos habría sido un empate.

“Aguillón tenía más peleas que Sanabria, ya era campeón del Caribe, todas las críticas que hace (Martos) están refutadas y no perderé tiempo en una persona tan agria y lastimada como ese doctor”, abundó.

En ese sentido, Maldonado consideró que Martos trata de “sacar raja” con la muerte del púgil, y sus declaraciones tienen como trasfondo el propósito de sacar a Rafael Herrera de la presidencia de la CBDF. “El muchacho había perdido dos peleas en su carrera, pero independientemente de eso el encuentro estaba autorizado. Una derrota previa no define la autorización o no de un combate”.

El promotor insistió en que es falso que Aguillón no fuera apto para pelear 12 asaltos, pues ya le habían permitido enfrentar 10, y “si estás autorizado a pelear 10 rounds puedes pelear 12”, explicó.

“Él (Martos) aprovecha que no toda la gente conoce administrativa ni técnicamente el desarrollo del boxeo, es un oportunista”, afirmó.