Usted está aquí: miércoles 22 de octubre de 2008 Deportes La mayoría de los equipos se echan atrás y no dan espacios, dijo Palencia

■ El jugador justificó con este argumento la falta de goles en el conjunto auriazul

La mayoría de los equipos se echan atrás y no dan espacios, dijo Palencia

■ Señaló que hoy es difícil ganar porque el futbol se ha emparejado

■ Pidió dejar trabajar al Tricolor

Miguel Ángel Ramírez

La falta de gol en el equipo la justificó Francisco Palencia al señalar que se respeta “mucho a Pumas, esté como esté el equipo, y aunque no haya ganado en cuatro partidos” los rivales extreman precauciones ante ellos.

“En casa o de visitante, la mayoría de las escuadras se nos vienen a echar atrás. Tratan de no darnos espacios, porque saben del peligro y la explosividad que el equipo tiene. Entonces, las oportunidades de gol no son tantas”, explicó ayer Palencia durante la conferencia de prensa en la cancha dos de Ciudad Universitaria.

Lo anterior, puntualizó, no es ningún pretexto para su ineficacia ante la portería: “debemos tener la inteligencia de poder abrir a este tipo de equipos”.

Estimó también que si en el reciente duelo contra Puebla hubieran concretado alguna de sus oportunidades, “estaríamos hablando de otra cosa”. No se estuviera cuestionando “la falta de gol”.

Para él, “cuesta mucho trabajo” ganar en la actualidad, aunque rechazó que esto se deba a la irregularidad que impera en el torneo local.

“Todos los equipos tienen un nivel muy similar. Me parece que la liga es muy pareja. Me acuerdo cuando era chico, que llegaba un equipo al estadio Azteca contra América, Cruz Azul o Atlante, y lo goleaban, 3-0, 4-0, 5-0. Ahora ya no. Ha avanzado tanto el futbol y se ha emparejado, que cualquier equipo te puede ganar.

“Los equipos grandes –continuó– en este momento son por la afición y la capacidad de mercadotecnia que puedan tener, pero un cuadro, entre comillas llamado chico, que no posee tantos seguidores, tiene el poder económico para contratar buenos jugadores y eso hace que la liga sea muy pareja.”

Por otro lado, Paco pidió dejar “trabajar a la selección” nacional. “Se confió en el señor (Sven-Goran) Eriksson, como en su momento en los demás técnicos, y a las primeras de cambio cuando pierde un partido y empata otro, ya empezamos a ponerle piedritas en el camino”.

–¿Quién le está poniendo esas piedritas?

–Pues nosotros mismos, al empezar a cuestionarlo, a meterle presión –dijo, y agregó que “la cultura futbolística en México no es tan grande como debiera ser, y se apoya mucho en ustedes”, los medios de comunicación.

“Entonces, ustedes tienen que dar un punto de vista más objetivo, y con esto termino porque tengo que ir por mi hijo.”

Se le alcanzó a recordar que el plazo hasta el 19 de noviembre no se lo puso la prensa a Eriksson, sino los dueños de los equipos de primera división.

 
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