Rectifica Martínez Cázares sus puntos de vista sobre la isla
Tras reunirse unos 60 minutos con el canciller cubano Felipe Pérez Roque en la sede del Partido Acción Nacional (PAN), el líder del blanquiazul, Germán Martínez Cázares, calificó el encuentro como histórico y aseguró que la relación con los gobiernos ve hacia el futuro, no hacia el pasado, por lo cual se busca estrechar la cooperación. Anunció que el instituto político que encabeza se reunirá con el Partido Comunista Cubano y dijo que no busca imponer a otros países sus agendas de respeto a los derechos humanos y de acceso a la democracia.
En la reunión privada en la que estuvieron presentes integrantes del Comité Ejecutivo Nacional y legisladores panistas, Martínez Cázares obsequió al canciller el libro El porvenir posible, de Carlos Castillo Peraza; una artesanía de Santa Clara del Cobre, y una gorra de la selección de beisbol de México; a cambio, recibió una caja de puros. Al término del encuentro, Pérez Roque se retiró de la sede del PAN sin dar declaraciones, ya que debía trasladarse al Senado de la República.
El dirigente del PAN, en conferencia de prensa para hablar sobre esta visita, dijo que en ella “hemos intercambiado puntos de vista sobre la realidad económica en Cuba y en México. Pregunté al canciller por la salud del comandante Fidel Castro y sobre cómo están abordando las consecuencias de los recientes huracanes tan desastrosos para la isla”. Precisó que sobre la salud de Castro, el canciller le comentó que era satisfactoria, “que venía de una larga convalecencia y que intelectualmente está bien”.
Sostuvo que la agenda que promueve el PAN “no la imponemos a ninguno de nuestros vecinos, a ninguno de nuestros pueblos”. Se debe impulsar que las relaciones entre los gobiernos de Cuba y México, entre nuestros pueblos, sea “socialmente útil para nuestras comunidades”, agregó.
Al recordársele que en el sexenio pasado el PAN acusó al régimen cubano de ser violador de los derechos humanos y que el mismo Martínez Cázares fue uno de los principales críticos de la diplomacia cubana en ese momento, el líder panista insistió en que su partido no renuncia a su agenda, y puntualizó que “esta relación de los gobiernos ve al futuro, no ve el pasado, y por tal motivo quiere estrechar los lazos de cooperación, de respeto, económicos y de intercambio cultural que debemos tener con todos los pueblos de la tierra”.
Dijo que en adelante la relación será de “diálogo, de respeto mutuo, de no exigencia de claudicar convicciones. Yo estoy dispuesto a que el partido corresponda a esa cortesía, visitando la sede del Partido Comunista Cubano en cuanto lo acordemos”. Agregó que hay satisfacción en el PAN por los acuerdos alcanzados en materia migratoria y en los préstamos que hay con Bancomext.
“El PAN está dispuesto a impulsar los mecanismos legislativos o administrativos necesarios para que nuestros intercambios comerciales, que en algún otro momento fueron mayores que los de ahora, se incrementen”, indicó. Agregó que también agradeció el apoyo del gobierno cubano para que México lograra un asiento en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.