Usted está aquí: martes 21 de octubre de 2008 Capital Perverso, dar uso electoral al tema de la seguridad: CDHDF

■ Buscan combatir delito con delito: Álvarez

Perverso, dar uso electoral al tema de la seguridad: CDHDF

Mirna Servín Vega

En vísperas de la contienda política del año 2009, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Emilio Álvarez Icaza Longoria, advirtió sobre el irresponsable y perverso uso electoral del tema de la seguridad, y aunque calificó de legítimo el reclamo de la ciudadanía en la materia, agregó que es extraordinariamente peligroso recorrer un camino ya andado, a través de perversas ofertas electorales, como el endurecimiento de las penas.

Durante su participación en el foro Prevención, Policía y Seguridad, realizado en la Cámara de Diputados, exhortó a revisar “si en el combate a la inseguridad y violencia, la medicina que nos estamos recetando no es parte de la enfermedad. Tenemos que revisar si las dosis y el tratamiento que nos estamos dando nos ayudan a curarnos o son parte del mal”.  

El presidente de la CDHDF dijo que, al menos durante los 15 años recientes, se ha optado por transitar por la ruta de incrementar las penas, el autoritarismo y la severidad: “No estaría mal que revisáramos si eso no es parte del problema: ¿Qué pasó en los noventas con el catálogo de delitos graves?, ¿cómo era en los noventas y cómo es ahora?”

Inoperante aparato de justicia

“Tenemos un aparato de justicia que no está funcionado –reiteró– pero repetimos la dosis que nos dimos hace algunos años y lo que decimos es ‘vamos a darles más atribuciones, porque ahora sí ese es el medio infalible’.

“Estamos regresando con la cantaleta de la pena de muerte, de la reducción de la edad penal, de incrementar los delitos: a un aparato de justicia que no está funcionando le quieren dar más poder. ¿No se nos ha ocurrido pensar lo que va a pasar en materia de extorsión si les damos a este aparato de justicia esas armas?”, cuestionó.

Álvarez Icaza Longoria dijo que, sobre todo en tiempos electorales, se presenta a la opinión pública el falso dilema entre derechos humanos y seguridad, incluso desde las mismas instituciones legislativas, “que acompañan que la mejor manera de combatir el delito es cometiendo delitos.

“Eso es gravísimo, no sólo para el Estado democrático de derecho, sino para la civilidad. Cuando se legitima ese tipo de cosas y pasan los abusos, nos extrañamos, nos indignamos, nos azoramos: cuando pasan cosas como lo del joven Martí, donde servidores públicos se lo llevaron en un retén ilegal, deberíamos preguntarnos: ¿cómo llegamos a la idea de esos retenes?”, alertó.

En resumen, Álvarez Icaza Longoria señaló que la inseguridad en México no se va a resolver sólo por la vía del autoritarismo, de endurecer las leyes y de poner más policías, porque la situación de la seguridad comprende temas tan complejos como la prevención.

 
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