El ombudsman acusa a la dependencia de “politizar” su actuación en torno al asesinato
Hubo “omisiones” y “conductas irregulares”
En un nuevo episodio del enfrentamiento entre la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Procuraduría General de la República (PGR) por el asesinato del periodista Bradley Roland Will, ayer el organismo que encabeza José Luis Soberanes responsabilizó públicamente a la dependencia federal de haber “politizado” el caso y señaló que “responde con descalificaciones y afirmaciones que no sustenta, en lugar de argumentar y fundamentar sus dichos”.
Durante una recreación científica de los hechos en que perdió la vida el comunicador de Indymedia, el 27 de octubre de 2006 en Oaxaca, basada en las conclusiones de los peritos contratados por la CNDH para descifrar la mecánica de los dos disparos que recibió Brad Will durante un enfrentamiento entre miembros de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y policías y funcionarios del municipio de Santa Lucía del Camino, Mauricio Farah Gebara, quinto visitador del organismo, reiteró que la PGR cometió “conductas irregulares” y “omisiones” durante su investigación ministerial.
Las deficiencias de los servicios periciales de la dependencia que encabeza Eduardo Medina Mora, aplicados en las pesquisas sobre la muerte del periodista estadunidense, “no le permitieron a la PGR plantear de manera correcta una hipótesis para llegar a la verdad histórica del hecho y, en su caso, determinar la secuencia, los tiempos y la distancia a la que se realizaron los disparos”, añadió el visitador.
Farah Gebara y Epifanio Salazar Araiza –médico cirujano especialista en medicina forense y ex director de servicios periciales de la PGR– expusieron durante dos horas sus argumentos, que refutan la “versión de los peritos oficiales” de la PGR sobre el resultado de las investigaciones sobre la muerte de Brad Will.
“Insistimos: los disparos no se hicieron a dos metros de la víctima; el arma fue accionada en dos ocasiones subsecuentes por el mismo victimario a entre 35 y 50 metros de distancia”, refirió el doctor Salazar.
Ambos expusieron también varios videos, entre ellos el que grabó Bradley antes de a su muerte, así como una recreación gráfica y física de la mecánica de los disparos.
Método y explicaciones
Luego explicaron el método que se utilizó para realizar los peritajes de audiometría y medición de imágenes cuadro por cuadro, los cuales llevaron a los peritos de la CNDH a concluir que los dos disparos de arma de fuego que privaron de la vida al comunicador forzosamente tuvieron que ser realizados a larga distancia.
El médico cirujano abundó: “La posición victima-victimario fue la siguiente: el sujeto que disparó el arma se encontraba al frente de Bradley e incide de manera directa en el primer disparo sobre el epigastrio (ubicado en la zona abdominal) del periodista. La bala se aloja en la columna vertebral, a nivel de la primera vértebra lumbar.
“La segunda lesión por impacto con la misma arma de fuego se presenta de inmediato de manera sucesiva a la primera; evidentemente, por una reacción instintiva de defensa y por el dolor que le produce la primera bala alojada en su abdomen, (Bradley) se flexiona hacia adelante, impactando la segunda (ojiva) en su costado derecho antes de que la víctima cayera al piso”, puntualizó. Una y otra vez Epifanio Salazar insistió en que los peritos de la PGR están equivocados.