■ Su implantación en el Distrito Federal, hecho inédito, afirma
Mirón: en crisis, viable el seguro de desempleo
■ Cumple un año el programa de apoyo económico que otorga el GDF a cesantes
■ La capital, lista para el retorno de mexicanos de EU, dice
Ampliar la imagen Imagen del 6 de diciembre de 2007, cuando el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, entregó las primeras tarjetas de seguro de desempleo. El acto fue suspendio ante la gran cantidad de personas que acudieron a recogerlas para hacer efectivo el apoyo Foto: José Antonio López
La ciudad de México está preparada para recibir entre 20 mil y 30 mil migrantes que, se calcula, arribarán por la crisis financiera de Estados Unidos, aseguró el secretario de Trabajo y Fomento al Empleo, Benito Mirón Lince.
El funcionario indicó que serían canalizados a los programas de fomento cooperativo impulsados por la administración capitalina o bien, de flexibilizarse las reglas de operación, integrarlos al programa de seguro de desempleo mientras se incorporan al mercado laboral.
Tras informar de la realización del segundo Congreso Internacional de Cooperativas el 16 y el 17 de octubre, con la presencia de 800 asistentes de Europa y América Latina, señaló que a un año de que fue puesto en operación, y pese a las críticas de las autoridades federales, el seguro de desempleo, inédito en el país, hoy es una alternativa viable desde el punto de vista económico, ya que de enero a septiembre fueron atendidas 53 mil 138 personas, es decir, 22.6 por ciento de un total de 235 mil desempleados, con una erogación de 210.7 millones de pesos, lo que ha permitido que uno de cada cinco de los beneficiarios cuente con un empleo formal.
Mirón Lince señaló que el darle rango de ley de manera unánime por la Asamblea Legislativa “nos garantiza que tengamos un presupuesto para el año entrante, pues ya no está al gusto de nadie, es obligatorio”, lo que nos permitirá paliar la grave situación económica que está incrementando el número de pobres en el país, reflejado en un crecimiento de la tasa de desempleo abierto nacional de 4.15 por ciento, la más alta del sexenio.
Agregó que sólo en el tercer trimestre del año creció 50 por ciento la atención diaria en los 34 módulos instalados en las delegaciones políticas y el Sistema de Transporte Colectivo, al pasar de 200 a 300, lo que significó la entrega de 6 mil seguros de desempleo mensuales. Así que estamos previendo ejercer 170 millones de pesos de octubre a diciembre, para atender a alrededor de 72 mil personas, y solicitar una ampliación presupuestal para el año próximo respecto de los 383.2 millones autorizados para 2008.
Reconoció que “la crisis económica nos está pegando, pues ninguna entidad federativa, por si sola, puede resolver un problema de este nivel, pero los dineros destinados a los programas sociales no se afectarán.
Destacó que la prioridad del gobierno capitalino no es salvar empresas, sino trabajar en función del beneficio de la mayoría de los habitantes. Y ahí no se va a sacrificar ningún peso”.
La meta, dijo, es favorecer la reactivación del mercado interno, los niveles de bienestar de la población y un mayor dinamismo de las cadenas productivas, mediante la entrega de un seguro de desempleo, y promover la participación en alguno de los cursos de capacitación para crear cooperativas.
Indicó que esta semana se dirigirá un oficio a los 16 jefes delegacionales para que en su programa operativo anual consideren la creación de una dirección de fomento cooperativo, que no se ha hecho pese a publicarse la ley respectiva; así como a los diputados de la ALDF, para que la aprueben.
Señaló que la ciudad “se está preparando para atender entre 8 y 10 por ciento de los migrantes que regresen al país, aun cuando no es una gran exportadora”.
Se calcula, dijo, que entre 20 mil y 30 mil personas arribarán a la capital, por lo que se está solicitando un presupuesto adicional para atenderlos mediante un programa similar al del seguro de desempleo o flexibilizar las reglas de éste para incluirlos como una atención extraordinaria.
Precisó que en este momento es imposible apoyarlos porque está dirigido a gente que perdió su empleo desde el 1º de enero de 2006 a la fecha y su lugar de trabajo es el Distrito Federal, por lo que ellos no caben en esta consideración.