■ Se comprometen a incluir recapitalizaciones y garantías públicas a los préstamos
Las 15 naciones de la zona euro anuncian medidas para evitar más quiebras bancarias
París, 12 de octubre. Los países de la zona euro anunciaron que garantizarán el financiamiento de sus bancos hasta diciembre de 2009 y están dispuestos a comprar sus activos. El plan consistirá en una recapitalización de las instituciones bancarias y en conceder garantías públicas a los préstamos que otorgan, anunció el ministro belga de Finanzas, Didier Reynders. “Ahora falta que cada país fije la suma que quiere consagrar. Esto deberá fijarse de aquí al miércoles”, declaró el funcionario a la prensa.
El objetivo de la reunión de este domingo en París era anunciar medidas suficientemente fuertes para impedir que las bolsas se vuelvan a hundir en la apertura del lunes, tras conocer la peor semana de su historia. El proyecto de declaración reitera que los países del Eurogrupo se comprometen a impedir cualquier quiebra bancaria que ponga en peligro el sistema financiero en su conjunto.
“Los gobiernos se comprometen a evitar la quiebra de cualquier institución importante para el sistema, con los medios adecuados, incluidas las recapitalizaciones”, señala el borrador.
Los gobiernos velarán por “el interés de los contribuyentes y se asegurarán de que los accionistas y los directivos afronten las consecuencias de la intervención. La recapitalización de emergencia de una institución se verá seguida de un plan de restructuración apropiado”, aclara.
Esta declaración menciona asimismo las normas de contabilidad a las que se someten los bancos y prevé aligerarlas para que los activos bancarios no se vean penalizados en los balances. También está destinada a coordinar planes nacionales, inspirándose en las propuestas del primer ministro británico, Gordon Brown, que compaginan la nacionalización parcial de los bancos con garantías estatales a los préstamos interbancarios.
Más planes de rescate
Las sumas, se insistió, incluyen a la vez los recursos que podrán ser utilizados para recapitalizar a los bancos y los destinados a garantizar las transacciones interbancarias. Aunque el plan no precisa el monto concreto de las medidas previstas, Sarkozy aseguró que el lunes será el momento de anunciar las cifras. Igualmente, el lunes por la tarde, Alemania, Francia, Italia y otros países presentarán de forma “simultánea” los detalles de sus planes de rescate, según Sarkozy, cuyo país ejerce la presidencia rotativa de la Unión Europea.
Según el documento, los líderes se comprometieron ayudar a la suscripción o suscribir las emisiones de deudas de bancos por periodos de hasta cinco años, para complementar los esfuerzos del Banco Central Europeo para descongelar los mercados de préstamos interbancarios.
El Presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Barroso, confirmó ese punto en la rueda de prensa mantenida con Sarkozy y otros. Funcionarios ha-bían sugerido que emergerían medidas más que retórica de la reunión, en la que también participó el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet.
“Si la confianza en los mercados no se restaura este fin de semana, será el final del juego, calculó Marco Annunziata, economista jefe de UniCredit.
Al mismo tiempo que se dio a conocer la medida de la eurozona, en Washington los países emergentes y ricos debatían sobre cómo frenar el contagio de la crisis.
La reunión extraordinaria de los 15 países que integran la Eurozona en París será seguida el miércoles y el jueves por la cumbre de la Unión Europea, integrada por 27 países, en Bruselas.
Estos anuncios se suman a un plan anunciado por el Grupo de los Siete países más industrializados (G7) el pasado viernes, para coordinar medidas, y a una reunión entre ese mismo club y países emergentes (G20) en Washington.
Pero como en el caso europeo, el plan del G7 “urgente y excepcional” sólo se comprometió a “utilizar todas las herramientas disponibles para respaldar a instituciones financieras importantes para el sistema y prevenir su quiebra”, y a dar “todos los pasos necesarios para descongelar los mercados de crédito y moneda”.
El plan para hacer frente a la crisis financiera se centra en dos pilares: la garantía de los préstamos interbancarios y el apoyo a las entidades para evitar su quiebra, recurriendo incluso a recapitalizaciones.