■ Los perredistas quieren revisar la documentación concerniente a la parestatal

Senadores del PAN, por avanzar ya en la privatización de Pemex; PRD, por esperar

■ Proyecto para energías renovables prevé subsidio a trasnacionales: asesores del FAP

Andrea Becerril

Aunque el Partido Acción Nacional (PAN) tiene prisa para que se voten hoy los anteproyectos de dictamen de la reforma energética que están listos, los legisladores del Partido de la Revolución Democrática decidieron anoche que esperarán hasta que les presenten la totalidad de los documentos, sobre todo aquellos que tienen que ver de manera directa con la privatización de Petróleos Mexicanos (Pemex).

“Necesitamos saber qué contienen los anteproyectos de dictamen de la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional en Materia del Petróleo y la Ley Orgánica de Pemex; antes de eso no tiene sentido votar de manera individual, cada uno de los siete documentos”, comentó el senador perredista Arturo Núñez, luego de una larga reunión con el grupo de asesores del Frente Amplio Progresista (FAP).

Sin embargo, en entrevista por separado, el senador del PAN Rubén Camarillo consideró que los cuatro anteproyectos terminados se refieren a temas en los que hay consenso, “que se han discutido muchísimo y aunque no nos comen las prisas, creemos que pueden aprobarse, para pasar luego a los otros tres, en los que hay puntos divergentes”.

Los cuatro anteproyectos –el que crea la Ley de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, la Ley para el Aprovechamiento Sustentable de la Energía, las reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y la Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables– fueron analizados por los senadores Núñez y Pablo Gómez, conjuntamente con los asesores.

En el encuentro, que se prolongó por casi cinco horas, los asesores Mario Di Costanzo, el embajador Eduardo Navarrete, Alberto Montoya, Fluvio Ruiz Alarcón y Gregorio Vidal, hicieron una serie de observaciones, sobre todo a la legislación propuesta en materia de energías renovables, ya que consideran que avanza en la privatización de la electricidad y además establece subsidios para las trasnacionales.

Respecto de los anteproyectos de dictamen de la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional, la Ley Orgánica de Pemex y la Ley de la Comisión Reguladora de Energía, donde están las disposiciones que podrían abrir la paraestatal al capital privado, deberán estar concluidos para el lunes, según se determinó en la reunión del jueves pasado, en la que el presidente de la Comisión de Energía, el priísta Francisco Labastida, dio instrucciones a los secretarios técnicos para que elaboraran los documentos respectivos, los que incluirían “corchetes” en aquellos puntos en los que no existe acuerdo.

En el anteproyecto de dictamen de la Ley Orgánica de Pemex se incluirá un capítulo especial sobre los contratos que la paraestatal podrá signar con empresas privadas, para edificar obras y alquiler de equipo y maquinaria.

Labastida reiteró ayer que ello no implica en forma alguna privatizar las áreas estratégicas de Pemex, porque se trata sólo de contratos para perforar pozos y para la construcción de refinerías y otras obras, y al contratista se le pagará exclusivamente por el trabajo que desempeñe.

La mayor discusión

El anteproyecto de Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables y para el Financiamiento de la Transición Energética –uno de los cuatro que hoy considerarán los integrantes de las comisiones de Energía y de Estudios Legislativos– es el que mayor discusión desatará, ya que se abre el camino para ahondar en la privatización de la electricidad.

El anteproyecto de dictamen se basa en las iniciativas de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde en torno a ese tema y propone que empresas privadas, fundamentalmente trasnacionales, puedan generar electricidad, como lo hacen en la actualidad, pero mediante fuentes renovables, como la radiación solar directa en todas sus formas, el movimiento del agua en cauces naturales o artificiales, la energía oceánica en sus distintas formas, el calor de los yacimientos geotérmicos y la biomasa.

Las empresas generadoras de energía contarán además con un subsidio inicial, a través de un fondo para la transición energética, que se conformará con recursos públicos y en el que aún no se ponen de acuerdo los legisladores.

El panista Rubén Camarillo comentó que, de hecho, ya hay empresas privadas dedicadas a la generación de energía eléctrica y lo único que cambia es que ahora lo harán mediante fuentes alternas, renovables.