■ El sector financiero está fuera de control porque estamos en pánico, advierte especialista
Caen bolsas de Latinoamérica por la fuga de inversionistas de mercados emergentes
■ El gobierno de Brasil paraliza dos veces los negocios para contener un descenso de 15%
Buenos Aires, 6 de octubre. Acciones, bonos y monedas de América Latina se hundieron por el agravamiento de la crisis financiera mundial, lo que generó una ola de pesimismo sobre los mercados emergentes.
El índice MSCI de acciones latinoamericanas perdió casi 20 por ciento, debido a que los inversionistas abandonaron activos de países emergentes y se refugiaron en masa en el oro y en los bonos del tesoro. El índice latinoamericano, en el que pesan mucho las acciones brasileñas, cayó 11.38 por ciento.
“Estamos en estado de pánico. Los mercados están fuera de control”, expresó Bertrand Delgado, economista de IDEAglobal. La Bolsa de Sao Paulo cayó 15 por ciento, lo que obligó a paralizar dos veces sus negocios. Posteriormente moderó las pérdidas a una baja final de 5.45 por ciento, gracias a medidas “anticrisis” anunciadas por el gobierno.
La bolsa y el peso de Chile también sufrieron los estragos. Las acciones del índice referencial chileno IPSA cerraron con una baja de 6.22 por ciento, la caída de la bolsa chilena fue acompañada por el fuerte declive de metales industriales, como el cobre, clave para las exportaciones y la economía del país. El peso, en tanto, retrocedió a 585.50 pesos por dólar.
El Merval de Argentina sufrió una caída de hasta el 11.56 por ciento durante la jornada, arrastrado por el desplome de los mercados mundiales, en lo que fue el peor nivel desde julio de 2005.
La Bolsa de Colombia cayó 4.86 por ciento, golpeada por las bajas de las acciones de la petrolera estatal Ecopetrol y de firmas bancarias, producto de una ola mundial de ventas en medio de la incertidumbre sobre la estabilidad financiera mundial. El Indice General de la Bolsa de Colombia terminó en 8 mil 761.49 puntos.
Las monedas también sufrieron los efectos. En Brasil, el real se debilitó 7 por ciento, al caer a 2.20 unidades por dólar frente a un cierre de 2.046 unidades el viernes, es su mayor caída en un día desde enero de 2002. El peso argentino interbancario cayó 1.1 por ciento a 3.1925/3.1975 por dólar.
“Este ambiente de crisis sin precedente y, por ahora, sin perspectiva de una solución definitiva (...) puede requerir alguna acción por parte del Banco Central brasileño, que podría disponer de una pequeña parcela de las reservas internacionales para aumentar la liquidez en el mercado cambiario”, expresó Silvio Campos Neto, economista jefe del banco local Schahin.
La escasez mundial del crédito y las preocupaciones por una desaceleración económica mundial se manifestaban también en una baja de los precios de las materias primas, principal rubro para las exportaciones de Latinoamérica.
En ese marco de estrechez, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció medidas para mejorar los mecanismos que permiten a las entidades financieras hacerse de liquidez en forma inmediata, una decisión que sigue al anuncio de Chile el domingo de repatriar ahorros desde bancos en el exterior.
“No hay duda de que estamos en el peor momento del año para los mercados, ya que la mayoría de los operadores quieren hacerse de liquidez”, mencionó Marcelo Trobato, analista de Caja Social de Inversiones de Argentina.