Navieros no pueden elevar tarifas pese al costo del diesel
Mazatlán, Sin., 2 de octubre. Para la industria naviera que opera en México la crisis económica y financiera de Estados Unidos no está entre sus mayores preocupaciones, como sí lo es el incremento al precio del diesel, que representa alrededor de 30 por ciento de sus costos de operación, aseguró el presidente de la Asociación Mexicana de Agentes Navieros (AMANAC), Felipe Bracamontes.
El empresario detalló que para compensar las repercusiones ocasionadas a la industria por el aumento de los energéticos, han tenido que recurrir a estrategias como el cobro de cargos extras, cancelación de puertos de escala a nivel mundial, lo que ha afectado la contratación de buques, además que ha disminuido la velocidad al navegar.
“Hasta el momento no tenemos una estimación de los efectos que tendrá la crisis estadunidense para las navieras que operan en México, ya que la mayoría de las exportaciones a ese país se hacen por autotransporte de carga o ferrocarril; en cambio, el costo del diesel sí puede tener afectaciones en el mercado mexicano”.
El vicepresidente de la AMANAC, Francisco Orozco Mendoza, detalló que los costos de operación para cada naviera son diferentes, pero se estiman en 30 por ciento para algunas como Maersk, “que tiene una embarcación llamada Emma Maersk, que consume 70 mil dólares diarios de diesel cuando está navegando”.
Explicó que el costo por tonelada de combustible costaba entre 200 y 300 dólares y ahora está en 500 dólares por tonelada, “lo que representa costos altísimos que no se pueden compensar con el aumento de tarifas porque en México hay mucha competencia, alrededor de 30 navieras, lo que impide aumentar los precios del transporte, y para conseguir un incremento tendría que hacerse pláticas y consideraciones”.
Mejoraron operaciones
A pesar de ese panorama, Bracamontes y Orozco consideraron que a raíz de la privatización los puertos y el desarrollo de las Administraciones Portuarias Integrales (API) México ha logrado una notable mejoría de sus operaciones portuarias y de comercio exterior, en comparación con los puertos de Centro y Sudamérica.
“Las API y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes han hecho inversiones importantes, están en marcha licitaciones como la de Punta Colonet, en la que hay alrededor de 30 empresas interesadas que ya entregaron sus cartas de intención, y existen proyectos paralelos en marcha en los que creemos”, señaló Orozco.