■ “México no está aislado y no va a ser la excepción”, asevera el presidente de la ABM
Cuestiona Enrique Castillo dichos de que el país no será afectado por la crisis en EU
■ El escenario será más complicado, señala; disminuye la morosidad en crédito al consumo
Ampliar la imagen Enrique Castillo, presidente de la Asociación de Bancos de México, en su oficina en la Torre Mayor, en imagen de archivo Foto: La Jornada
Enrique Castillo, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), advirtió que “bajo ninguna circunstancia se puede afirmar que el país no se verá afectado por la crisis financiera” originada en Estados Unidos y que esta semana tuvo expresiones en varios países de Europa.
“México no está aislado y no va a ser la excepción”, expuso en declaraciones a La Jornada. El único pronóstico que “me atrevo a hacer” es que el escenario se va a volver más complicado para todos, declaró.
Expuso que la cartera vencida de los deudores de hipotecas y tarjetas siguió en aumento en el tercer trimestre del año, periodo para el que no hay todavía cifras definitivas. Sin embargo, aseguró que en el caso de los préstamos al consumo, donde se incluye al dinero plástico, la morosidad crece a un menor ritmo que en la primera mitad de 2008.
Interrogado respecto de las dificultades que pueden tener los bancos extranjeros que operan en México derivada de la crisis en Estados Unidos sostuvo que esas firmas “están aquí para el largo plazo”, pero enseguida anotó: “después de lo que está pasando, hay que aprenderse esta frase: nada es imposible”.
Las circunstancias financieras internacionales son inéditas y no se circunscriben sólo a Estados Unidos, el principal socio comercial de México, expresó el presidente de los banqueros.
El sistema financiero que opera en México, añadió, está en una posición privilegiada de cara a estos actos, por su nivel de capitalización y calidad de activos. Pero ello, acotó, no quiere decir que no pueda ser de alguna manera afectado por esta circunstancia.
“Sin lugar a dudas, habrá alguna afectación económica en el país, pero es muy pronto para hacer un pronóstico preciso de las consecuencias de la crisis en Estados Unidos”, dijo. El hecho de que el país y el sistema financiero sean menos vulnerables, “no quiere decir que no tengamos suficientes preocupaciones de un escenario económico difícil para todos, no nada más para las personas que deben al banco. La actividad económica en términos generales se va a ver afectada por esta circunstancia”.
–La banca puso en práctica esquemas de pago para deudores que tienen problemas para hacer frente a la mensualidad. ¿Cómo han funcionado esos planes?
–Ha habido mucho acercamiento en general de los deudores con los bancos. Hay avances, pero insistimos en que se sigan acercando para buscar soluciones si enfrentan dificultades de pago. El sol sale mañana, esto no se acaba, y es importante cuidar el historial de crédito.
Enrique Castillo, también director general del Grupo Financiero Ixe, expuso que la volatilidad financiera, expresada en restricciones al crédito y alza en algunas tasas de interés, anticipa que “vienen tiempos de prudencia”, tanto para quienes prestan como para quienes se endeudan. “Una de las causas de lo que pasa en los mercados internacionales es que muchos de esos países estaban viviendo por encima de sus posibilidades y hay que vivir de acuerdo a tus posibilidades, tenemos todos que vivir de acuerdo a nuestras posibilidades. Es una buena experiencia que nos están contagiando”. Apunta: “vendrá un ciclo de épocas más difíciles y tendremos que adaptarnos a esas circunstancias todos, sin lugar a dudas, por supuesto que hay que verlo con optimismo, pero también con un realismo de menor crecimiento en los próximos meses”.
–Respecto del primer semestre del año, ¿cómo ha variado la cartera vencida en préstamos al consumo e hipotecario?
–En la parte empresarial, que es la cartera de crédito más importante, se observa un comportamiento bastante estable de la morosidad. En los préstamos de vivienda ha habido un crecimiento moderado de la cartera vencida y en tarjeta de crédito se ha seguido deteriorando la cartera vencida, pero a un ritmo menor del que se había observado. Pero son cifras preliminares.
–Ahora que existe un poco más de información de lo que ocurre en Estados Unidos, ¿qué anticipa para los siguientes meses para el sector financiero en México? ¿Disminuirán las utilidades, habrá necesidad de nuevo capital?
–El panorama está bien poco claro. Hay mucha incertidumbre de qué es lo que viene hacia delante como para hacer un pronóstico preciso. Lo que sí creo, sin temor a equivocarme, es que vamos a tener circunstancias más adversas de crecimiento económico los meses que vienen.
–¿Pero respecto del sistema financiero, o bancario en particular, qué se espera por el hecho de que varias de las principales instituciones de aquí son filiales de firmas extranjeras?
–Los compromisos que tiene la banca internacional en el país son de largo plazo y esos compromisos se van a dar en las buenas y en las malas. No veo un cambio en la estrategia de las instituciones que tienen inversiones en el país a propósito de estos difíciles escenarios. Pero nada es imposible. Después de lo que estamos experimentando, hay que aprenderse esta frase: nada es imposible.