■ La obra permitirá desarrollar la economía de Tláhuac: Ebrard
Otorgan $85 millones para mitigar efectos ambientales de la línea 12 del Metro
Una vez evaluados los daños e impactos potenciales al medio ambiente por la construcción de la línea 12 del Metro, la Secretaría del Medio Ambiente del Distrito Federal determinó destinar 85 millones de pesos para obras de mitigación y restauración ambiental, informó la titular de la dependencia, Martha Delgado Peralta.
En tanto, el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard Casaubon, señaló que conectar Tláhuac al resto de la ciudad con este sistema de transporte tendrá como consecuencia el desarrollo de inversiones en la demarcación, lo cual deberá cuidarse que se realice de manera planeada y ordenada.
Durante un recorrido por barrancas de la delegación Álvaro Obregón, Delgado Peralta señaló que la dependencia a su cargo establecerá “el destino más pertinente” de los 85 millones de pesos para obras de mitigación durante la primera fase de la construcción de la línea 12 del Metro.
En entrevista, la funcionaria agregó que se trabaja también en una iniciativa para recuperar la vocación lacustre de Tláhuac y crear estrategias para poder garantizar que el uso del suelo no vaya a ser urbanizable.
En este sentido, Diana Lucero Ponce Nava, titular de la Procuraduría Ambiental y del Reordenamiento Territorial, señaló que se prevé la urbanización de 15 por ciento de áreas con uso de suelo agroecológico, rural o de conservación de Tláhuac, debido a las obras como la línea 12 del Metro y el Centro Integral de Reciclaje y Energía, propuestas en el Programa de Desarrollo Delegacional.
Sin embargo, señaló Ponce Nava, este impacto se podría mitigar con obras de reforestación, principalmente de pastizales y árboles adecuados a los humedales, y añadió que serán tres mil 250 árboles los que serán talados por las obras del Metro, por lo que la sustitución forestal será de aproximadamente 12 mil unidades.
Por su parte, al presentar el proyecto de la línea dorada del Bicentenario a ingenieros y arquitectos de colegios e instituciones de educación superior, Ebrard Casaubon aseguró que, además de instalarse empresas que antaño descartaron la zona por la dificultad para trasladarse, la actividad económica se diversificará y llegarán nuevos servicios como escuelas de educación superior.
En resumen, dijo, lo que se está haciendo es equilibrar la zona y lo mismo se tiene que hacer con la parte alta de Álvaro Obregón, donde hay también problemas de conectividad que se tienen que resolver, midiendo los impactos urbanos y pensando en el desarrollo de la ciudad para los próximos 20 o 30 años.
Insistió en la necesidad de que el Distrito Federal sea incluido en el Fondo Nacional de Infraestructura “y creo que lo vamos a lograr”, en primer lugar porque se trata de la capital de la República con un programa de obras de gran alcance y en segundo, por su carácter metropolitano que implica brindar servicios a más de 4.5 millones de personas de otras entidades que realizan sus actividades en la ciudad.