Inmigrantes en países de la OCDE, en los peores trabajos
París, 10 de septiembre. Los inmigrantes en los países de la OCDE aparecen en gran porcentaje en los trabajos duros, poco calificados y a menudo mal pagados, según un informe publicado por la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
En su informe anual sobre las perspectivas de las migraciones internacionales, la OCDE destaca que en 2006, los inmigrantes representaban una parte importante de la fuerza de trabajo y de empleo en los países de la organización.
Este porcentaje de inmigrantes en el empleo total registraba aumentos notablemente importantes en España, con 7 puntos entre 2002 y 2006, Irlanda e Italia.
Globalmente, el crecimiento promedio anual del empleo de inmigrantes alcanzó más de 6 por ciento en los últimos 10 últimos años en los países de la Unión Europea (UE) y 4.5 por ciento en Estados Unidos, lo que, de acuerdo con el informe “muestra la importancia de la inmigración en la dinámica del mercado del trabajo en los países de la OCDE”.
Mal pagados
Pero también la organización pone el acento en el hecho de que los inmigrantes están tremendamente presentes en los empleos duros y/o con poca calificación en sectores como la construcción, la hotelería, la restauración, la salud y los servicios sociales.
La OCDE destaca que en la construcción, la parte que ejercen los inmigrantes ha aumentado considerablemente en España (de 10 a 19.7 por ciento), en Irlanda y en Italia (de más o menos 9 por ciento a más de 14 por ciento). Paralelamente, en Europa del sur, entre 25 y 33 por ciento de los inmigrantes son empleados como obreros o en trabajo no calificados.
Por el contrario, los inmigrantes aparecen poco numerosos en profesiones que corresponden al nivel de empleados y tremendamente expuestos al desempleo en Francia, Alemania y Reino Unido.
La OCDE pone el acento en el hecho de que los inmigrantes son “generalmente menos remunerados que las personas nacidas en el país”, salvo en Australia, y que los procedentes de países que no son miembros de la OCDE tienen niveles de remuneración aún más bajos.
Y cita el caso de Estados Unidos, donde los salarios de los inmigrantes son particularmente bajos con respecto a los nacionales, con un promedio de diferencia de alrededor de 20 por ciento.
Sin embargo, la organización subraya que la diferencia de salarios entre inmigrantes y nativos es generalmente menos importante que la diferencia entre los salarios de hombres y mujeres.