Quedó claro: “el agro no es prioridad del gobierno”
El presupuesto asignado al campo para 2009 demuestra que para el gobierno ni el agro ni la soberanía alimentaria son prioridad, puesto que en lugar de aumentar los recursos a este sector, los disminuyó en cerca de “6 mil millones de pesos”, a lo cual se suman otros recortes en secretarías como la Reforma Agraria y la de Comunicaciones y Transportes, los cuales también afectarán a esta área, señalaron líderes campesinos, los cuales criticaron que para “cobijar a ciertos sectores, como es la seguridad pública, se esté descobijando a las áreas sociales”.
Max Correa, dirigente de la Central Campesina Cardenista (CCC), y José Jacobo Femat, presidente de la Central de Organizaciones Campesinas y Populares, señalaron en entrevistas por separado que con esto se demuestra que el campo no es uno de los rubros torales del gobierno de Felipe Calderón, ello aunque en las actuales condiciones de crisis alimentaria mundial debiera serlo. Añadieron que esto apunta a que le están dado prioridad a enfrentar los efectos de las crisis en lugar de proponer soluciones a las causas.
Comentó que “considerando el tipo de cambio y el índice de inflación”, los recursos que deberían ser canalizados al campo tendrían que haber alcanzado por lo menos “260 mil millones de pesos”. Cabe destacar que para este año se asignaron 204 mil millones.
Dado que no se consiguió ese monto, Correa expuso que “no caeremos en la dinámica perversa de querer utilizar al sector como una moneda de cambio en la negociación con la Cámara de Diputados; el gobierno envía deliberadamente un presupuesto a la baja para que los legisladores tengan que modificarlo a cambio de ceder en otras partidas”.
Ante esta posibilidad, sostuvo que lo que hará la CCC será pedir a los diputados que “reorienten” los recursos para el campo, con el propósito de dar prioridad a programas que garanticen la soberanía alimentaria, combatan la pobreza en el campo y generen opciones productivas y empleo, lo cual hasta ahora no ha ocurrido, porque el gobierno “gasta en el sector con criterios ineficientes; no saben aplicar los fondos con transparencia, oportunidad y efectividad; entonces para qué darle más dinero a alguien que no sabe gastar, es mejor ponerle criterios para el gasto”.
Jacobo Femat estimó que por lo menos se requería aumentar el presupuesto para el sector en “15 por ciento”, además de dar mayor importancia a programas que incentiven el desarrollo del campo.
Agregó que al presupuesto que propone el Ejecutivo debe cambiársele la orientación, pues se “descobija” a los programas sociales en beneficio de los de seguridad pública. “Hay que quitarle los tintes policiales y darle más tintes sociales”, consideró.
Cruz López Aguilar, líder de la Confederación Nacional Campesina, manifestó que el presupuesto para 2009 es “un insulto y una trampa” del gobierno a la Cámara de Diputados, por lo que pidió a los legisladores considerar la posibilidad de regresar la propuesta de la actual administración o, en su caso, obligarla a corregir lo necesario.
Sostuvo que el gobierno pretende subir 30 por ciento los recursos a la seguridad, lo cual no está mal, pero acotó que lo negativo es que “quiere hacerlo a costa del desarrollo económico y productivo del país”.