■ La compra del barco El señor de los mares, legal y auditada, dice
Califica Pemex de irrisorias las acusaciones de López Obrador
■ “La denuncia carece de sustento y busca confundir a la opinión pública”
Petróleos Mexicanos (Pemex) calificó de “irrisorias” las acusaciones de Andrés Manuel López Obrador respecto de supuestos malos manejos en la adquisición de un barco para almacenamiento de crudo, bautizado como El señor de los mares (Yuum K’ak’náab), y sostuvo que el esquema de adquisición fue auditado, se adjudicó a precios de mercado con beneficios para la petrolera y su costo fue de 455 millones de dólares.
“Las acusaciones que se hacen carecen de sustento y buscan confundir, una vez más, a la opinión pública con información falsa”, dijo la empresa en un comunicado, tras afirmar que “todas las etapas del procedimiento se llevaron a cabo a la luz pública y con la supervisión de las autoridades competentes.
“La acusación de que se pagó un sobreprecio por la embarcación, cinco veces a su valor real de mercado, resulta absurda y sólo confirma la intencionalidad” de esa versión, afirmó.
Sin embargo, reconoció la paraestatal, el costo final será de 758 millones de dólares, debido a que en el contrato se estableció un pago inicial de 50 por ciento del valor, más 180 mensualidades fijas con una tasa de interés de 12 por ciento anual. La operación contempla además el pago de servicios y mantenimiento de 751 mil 88 dólares al mes, más 3 millones 980 mil 234 dólares mensuales.
En su reacción a las acusaciones de López Obrador, Pemex manifestó, “sólo como referencia”, que la brasileña Petrobras ha pagado entre 900 y mil millones por operaciones similares y que existe información de que China recientemente habría adquirido una nave por 230 millones de dólares, pero “se trata de un casco, sin instalaciones para separar, procesar, mezclar, comprimir, bombear y exportar”.
Por otra parte, se asegura que Pemex pagó 300 millones de dólares de gastos administrativos. En este caso están confundiendo esta cifra con los gastos de operación y mantenimiento a 15 años. “Por tanto, la afirmación de que el precio pagado por la embarcación fue cinco veces superior al valor de mercado es irrisoria y la comparación con el FPSO (Floating Production Strage and Offloading System) que compró China, no puede hacerse bajo ningún concepto”.
Según Petróleos Mexicanos, más que daño al patrimonio, el barco ha traído beneficios operativos y económicos. Tras su travesía de 41 días desde los astilleros de Singapur, la embarcación llegó a México el 16 de marzo de 2007. Desde entonces la operación de la “unidad flotante de producción, almacenamiento y descarga” alcanzó poco más de 150.66 millones de barriles de petróleo crudo vendidos a diferentes clientes en el exterior.
Esta embarcación, añade, “es un ejemplo del tipo de tecnología que la industria petrolera está requiriendo hoy día ante los nuevos desafíos que impone la obtención de crudos más pesados. Dentro de los mayores logros destacan, por ejemplo, que al 31 de marzo de 2008 el superávit generado por la exportación de crudo a través del FPSO se estima, de manera gruesa, en 4 mil 237 millones de dólares.
“Por tanto, las utilidades de operación generadas equivalen a 4.18 veces el total de inversión del FPSO y sus costos asociados del periodo 2007-2022. Esto es igual a haber cubierto la totalidad de la inversión y costos de operación del FPSO en ese periodo y disponer aún de 3 mil 512 millones de dólares”.
En su argumentación, Pemex afirma que el barco permite mayor flexibilidad operativa a las instalaciones de producción en la sonda de Campeche; facilita aprovechar el gas extraído en los campos Maloob y Zaap, y logra “maximizar el valor económico de la explotación de sus reservas de hidrocarburos” en la región.
Recordó que la operación de compra del barco tuvo los objetivos de disminuir la inversión y operación a través de su “multifuncionalidad”; adelantar la producción e ingresos al permitir que “varios pozos iniciaran su etapa de producción antes de lo programado”; incrementar los ingresos pues, además de realizar actividades de proceso, permite el almacenamiento y mezcla de crudos que generan precios más atractivos para la empresa y mantienen la calidad del petróleo de Cantarell”.