■ Calderón sólo “simula” que se combatirá la inseguridad, señala

AMLO: por temor, las familias del norte huyen al extranjero

■ En el país únicamente “se castiga a quien no tiene para comprar la justicia”

Enrique Méndez (Enviado)

Ojinaga, Chih., 23 de agosto. Felipe Calderón sólo “simula” que combatirá la inseguridad y el crimen organizado, señaló en esta localidad Andrés Manuel López Obrador.

Si se quieren disminuir los índices de criminalidad en México, primero debe atacarse la impunidad, “pues sólo se castiga al que no tiene con qué comprar la justicia”, indicó.

Por ejemplo, refirió, cómo va a enfrentar a la delincuencia el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, “si es un delincuente confeso” que utilizó sus cargos como diputado federal y funcionario en la Secretaría de Energía para obtener contratos de Petróleos Mexicanos (Pemex) para la empresa de su familia.

“Los asesinatos no se van a resolver con medidas policiacas, amenazas de mano dura, más cárceles, penas más largas, no. Es un problema de impunidad porque no se aplica la ley parejo para todos. Siempre hay protección para unos cuantos maleantes”, afirmó.

En todo el país, y principalmente en el norte, resaltó, existe miedo entre las familias y muchas han emigrado a Estados Unidos en busca de paz. “Por temor se están yendo al extranjero”, afirmó.

En este punto de su discurso recordó que en la campaña presidencial los industriales organizados en el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y el Partido Acción Nacional entablaron una guerra sucia con mensajes de radio y televisión donde afirmaban que él era un peligro para México. “Hubo toda una campaña para meterle miedo a la gente. Inventaron que si ganaba iba a haber una catástrofe en todos los órdenes”.

Inclusive, refirió, “sacaron un chiste que contaban de que en una zona donde viven los acomodados, en Las Lomas (en el Distrito Federal), unos niños platicaban sobre las elecciones y le preguntaron a una niña por quién iba a votar. ‘Por el Peje’, dijo la niña. Y los niños exclamaron ‘¡Cómo!’ ‘Porque ya dijo mi papá que si ganaba el Peje nos vamos a ir a Miami’”.

Cientos de asesinatos

Sin embargo, agregó, ganó el PAN y en 18 meses ha habido cientos de asesinatos, “se desató la violencia y hay más inseguridad que nunca”, por ello las familias que pueden hacerlo prefieren huir del país.

Antes, en Manuel Benavides, municipio donde la Comisión Federal de Electricidad (CFE) compra la energía del lado estadunidense para abastecer a los consumidores en esta población, lamentó que el gobierno de Calderón pretenda resolver el problema de la inseguridad con medidas policiacas, “cuando la paz es fruto de la justicia”.

Luego, en entrevista, consideró prudente que “el gobierno federal se apoye en el Ejército, porque si no estaría peor” la criminalidad en el país, pero acotó que los responsables de los operativos militares vigilen su aplicación, “para que los soldados no quieran cometer abusos” o violen derechos humanos. “Ojalá que esto no siga pasando, porque tiene que haber vigilancia para que no se cometan atropellos”, sostuvo.

En sus declaraciones señaló que la administración federal no ataca las causas de la inseguridad, que se explican principalmente, afirmó, por una política económica que sólo ha hecho ricos a unos cuantos. “Hasta raro sería que durante 25 años de aplicación de ese modelo, y con los malos ejemplos que dan, no hubiera inseguridad ni violencia. Los potentados son unos irresponsables. Además, los domina la ambición al dinero, la condicia. Eso los tiene enajenados, enfermos”.

También cuestionó la reunión nacional de procuradores, que se llevó a cabo en la capital del estado. El mismo día en que los titulares del Ministerio Público sesionaron, dijo, ocurrieron 13 asesinatos en la entidad. “Esa es la realidad, y ¿por qué se llegó a este extremo?, porque no le han dejado otra alternativa a los jóvenes”.

Precisamente la noche del viernes, cuando López Obrador y sus colaboradores llegaban a Chihuahua para hospedarse, ocurrió un incidente provocado por agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP) y un policía adscrito a la Secretaría de Gobierno del estado, que viajaba en una motocicleta para seguir a las dos camionetas en que viaja el “presidente legítimo”, con el pretexto de la aplicación del Operativo Chihuahua.

En el Periférico de la Juventud, la moto se pegó a las camionetas, y detrás de él una pick up con seis federales. Las camionetas dieron vuelta en la esquina de Francisco Villa, para ingresar al centro comercial donde se encuentra el hotel Cityexpress, pero tanto el agente de Gobierno como los federales erraron la entrada y siguieron unos metros sobre esa avenida. Por ello, cuando dieron reversa e ingresaron al estacionamiento, López Obrador ya había entrado al hotel.

Sin embargo, los oficiales de la PFP se bajaron de la pick up y cortaron cartucho para amagar a los colaboradores del “presidente legítimo”, a quienes exigieron que se identificaran. Al ver la actitud de los federales, el agente de Gobierno les dijo que él acompañaba al convoy, para tratar de eludirlos. Luego, pretendió huir y, al perseguirlo, uno de los integrantes de la PFP –que dejaron la patrulla en un baldío para evitar que se tomara su número– tropezó y al caer soltó el rifle.

Los integrantes de la PFP dejaron ir al motociclista cuando éste se identificó como colaborador de la Secretaría de Gobierno.