■ Informes sobre declive de inventarios del combustible en EU, entre los factores del alza
Revierte petróleo mexicano cuatro sesiones de pérdidas y llega a 106.59 dólares
■ El crudo estadunidense cierra en 116 dólares y el Brent del mar del Norte en 113.47
El precio del petróleo mexicano ganó el miércoles cerca de tres dólares, la primer sesión al alza después de cuatro de pérdidas, al cerrar en 106.59 dólares, 2.96 más respecto a la jornada anterior, en el contexto de subidas generalizadas.
En las cuatro jornadas previas la cotización del crudo mexicano acumuló una pérdida de 6.66 dólares.
El alza del petróleo se registró luego que un informe del gobierno de Estados Unidos mostró declives en los inventarios de combustibles y crudo del mayor consumidor mundial. Durante la sesión de ayer el barril estadunidense cerró en 116.00 dólares, un avance de 2.99 dólares con relación al cierre del martes, después de que las preocupaciones por la demanda presionaran los precios a un mínimo de tres meses en la víspera, mientras que el Brent del mar del Norte terminó en 113.47 dólares, un alza de 2.32 dólares.
“La caída de los stocks de gasolina incitó a los inversores a comprar petróleo”, explicó Ellis Eckland, analista independiente de Chicago.
Refinerías reducen producción
Las reservas de gasolina estadunidense bajaron 6.4 millones de barriles, a 202.8 millones de barriles, en la semana finalizada el 8 de agosto, a causa de una menor producción, dijo la Administración de Información de Energía (EIA, por su siglas en inglés), lo que superó los 2.1 millones de barriles previsto por los analistas.
Es la tercera semana consecutiva en baja de estos stocks, que son seguidos de cerca por los inversionistas durante el verano, temporada de alto consumo. El descenso se debe, según los expertos, a una reducción de la producción en las refinerías estadunidenses, cuyo ritmo (85.9 por ciento de su capacidad de funcionamiento) es el más bajo para un mes de alta demanda.
Los inventarios de crudo, por su parte, se redujeron en 400 mil barriles, mostraron los datos de la EIA, mientras que los suministros de los destilados cayeron imprevistamente. Las reducciones de las existencias se produjeron después de que algunas compañías cerraron sus instalaciones en la costa estadunidense del Golfo de México ante el paso de la tormenta tropical Edouard.
Un debilitamiento de la demanda, debido a la desaceleración económica en Estados Unidos y en otros importantes mercados consumidores, ha incidido en el precio del petróleo, que ha retrocedido fuertemente desde que alcanzó un máximo histórico de 147.27 dólares el barril el pasado el 11 de julio.
La demanda petrolera estadunidense cayó en un promedio de 800 mil barriles por día en el primer semestre del año, frente al mismo lapso de 2007, lo que marcó su mayor descenso en 26 años, precisó el martes la EIA. A su vez los estadunidenses consumieron 2.8 por ciento menos en productos petroleros en las últimas cuatro semanas, en relación con el año anterior, mientras que el consumo de gasolina en particular bajó uno por ciento. “Si la demanda continúa mostrando señales de agotamiento y el dólar se mantiene firme, los precios caerán a 110 dólares” el barril, subrayó Eckland.
El crecimiento en economías emergentes, incluidas China y la India, impulsó la demanda petrolera en el transcurso de los últimos seis años, lo que a su vez alentó una escalada en la que, tomando como referencia el récord de julio, los precios del crudo se septuplicaron. Previamente en el año, los inversores optaron por las materias primas para protegerse contra la inflación y el debilitamiento del dólar, lo que proporcionó más soporte al petróleo.
Las hostilidades entre Rusia y Georgia, una ruta alternativa clave para el crudo y el gas que van desde el mar Caspio hasta Europa, también brindaron soporte.