■ “La desigualdad y la corrupción política, lastres para el desarrollo”
El cambio que necesita el país no se va a dar por la vía armada, sino en las urnas: AMLO
Zitlala, Gro., 10 de agosto. El cambio que necesita el país no se va a dar por la vía armada, sino por el camino de las urnas y apoyado con un movimiento de resistencia civil pacífica, afirmó aquí Andrés Manuel López Obrador al continuar su gira de trabajo por la región de la Montaña guerrerense.
Acompañado por el presidente municipal de Acapulco, Félix Salgado Macedonio, el senador Lázaro Mazón y el diputado federal Cuauhtémoc Sandoval, entre otros, López Obrador enfatizó que el movimiento que encabeza asumió la decisión de tomar la vía electoral para llevar a cabo la transformación de la vida política, económica y social del país, por lo que convocó a las comunidades de la región a participar en todos los procesos electorales. “Más temprano que tarde ese cambio por el que luchamos millones de mexicanos se va a dar.”
El tabasqueño se refirió nuevamente a la grave desigualdad que prevalece en México, así como a la corrupción política, elementos que son, dijo, los principales lastres para el desarrollo del país, a lo que se sumaría la injustificada privatización de la industria petrolera nacional, como parte de la privatización de más de mil empresas públicas en los pasados 25 años.
Durante ese periodo, destacó, no ha habido crecimiento económico, no se han abierto las plazas de trabajo que requieren los mexicanos y, por el contrario, se ha incrementado el costo de los productos básicos, así como la violencia y la inseguridad. Por ello, insistió, es imprescindible mantener el petróleo como palanca de crecimiento y bienestar para los mexicanos.
Subrayó que la gente se ha empezado a dar cuenta de la gravedad que representaría la privatización para el futuro de los mexicanos, y destacó que por ello la movilización ciudadana en defensa del petróleo se iniciará a escala nacional desde el momento en que los legisladores trabajen en la elaboración de los dictámenes de la llamada reforma energética.
Como anunció el sábado, el plan de acción de resistencia civil pacífica se dará a conocer el domingo 31 de agosto, a partir de las 11 de la mañana, en las principales plazas públicas de las 32 ciudades capitales, como parte de la convocatoria que lanzó a los más de 200 mil brigadistas en defensa del petróleo de toda la geografía nacional, quienes participarán en la mencionada jornada dominical para informarse sobre los pasos a seguir.
En el quinto día de visita a los municipios de la región de la Montaña, explicó que a la concentración del último domingo de este mes asistirán, además de los brigadistas, simpatizantes del Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo y ciudadanos dispuestos a evitar la privatización del sector energético y la entrega del petróleo al capital privado extranjero.
Recordó que en ese momento se llevaba a cabo la segunda fase de la consulta popular sobre el petróleo, que se desarrolló ayer en los estados del sur del territorio nacional, a los que llamó a votar por el no a la participación de particulares en diversas aéreas de la rama petrolera, por tratarse de un recurso que es propiedad de la nación.
“El sentimiento de la gente es que no se privaticen los bienes de los mexicanos, y debemos estar preparados para enfrentar cualquier eventualidad”, señaló, y destacó que tanto la derecha panista como el priísmo tienen la idea de que será fácil y sencillo su propósito de entregar la industria petrolera a las compañías multinacionales.
Los diputados y senadores de ambas fuerzas políticas “creen que van a dar un madruguete, que se van a adelantar y que va a ser sencillo el proceso legislativo”; sin embargo, va a empezar la movilización ciudadana cuando elaboren el dictamen de la reforma energética impulsada por Calderón, reiteró.
Señaló además que es una “minoría rapaz” la que aplica la actual política económica, que es la responsable del actual clima de violencia e inseguridad, “pero en lugar de esmerarse por enmendar lo mal hecho, se ha empeñado en perjudicar al pueblo con incrementos a los precios de los artículos de primera necesidad”.
López Obrador sostuvo, en la serie de reuniones que encabezó con comunidades de la región de La Montaña, que “la violencia y la inseguridad no se van a resolver ni aun teniendo un policía en cada esquina o aprobando la cadena perpetua o inclusive la pena de muerte, porque el problema es la falta de empleo y de oportunidades de estudio para los jóvenes”.