■ Exigen a la Universidad de Valle de México que los reinstale
Cesan a 30 docentes por intentar crear un “sindicato auténtico”
Treinta profesores de la Universidad del Valle de México (UVM) campus Texcoco fueron cesados por intentar formar un “sindicato auténtico” para remplazar al de protección que contrata la institución, informaron los afectados. Explicaron que el primero de julio 29 docentes presentaron una demanda por “despido injustificado” ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del Distrito Federal, en la que exigen ser reinstalados.
En entrevista, los profesores de sicología Eunice Ferra y David de la Torre Fernández, así como Martín Álvarez Pulido, quien imparte clases de ingeniería en sistemas computacionales, afirmaron que las condiciones de trabajo en los campus foráneos de la UVM –propiedad desde 2000 de la trasnacional estadunidense Laureate Education Inc– son “deplorables e inequitativas”, pues los sueldos van de 63 a 100 pesos por hora de clase y carecen de vacaciones pagadas y prestaciones, así como de estímulos y capacitación.
Señalaron que expusieron esa situación al Sindicato Justo Sierra, el cual tiene el contrato colectivo de trabajo, que es de Ramón Gámez, pero lo único que consiguieron fue que los despidieran.
Afirmaron que el gremio insiste en que “deberíamos estar agradecidos de que la UVM viniera a Texcoco a abrir fuentes de trabajo”, y que ante la persistencia de las pésimas condiciones laborales “volvimos a hablar con el rector Ángel Villa Escárcega, quien nos dijo que él escogía al representante sindical.
Los docentes manifestaron que hay “discriminación laboral entre los planteles foráneos y los del Distrito Federal (colonia Roma, Tlalpan y Lomas Verdes), porque “los de provincia no tenemos estabilidad laboral y sólo nos pagan las horas que trabajamos durante los ocho meses del ciclo educativo; los otros cuatro no, pero nos presionan con el propósito de que estemos disponibles para la institución. En caso de no hacerlo nos castigan dándonos menos horas de clases”.
Ferra indicó: “casi no tenemos prestaciones, sólo Seguro Social; en los planteles del Distrito Federal, los profesores son contratados a prueba, máximo por un año, y después les dan planta. Tienen 40 días de vacaciones, prima vacacional, seguro de gastos médicos mayores y la posibilidad de escalar en el tabulador. De igual forma, bonos de productividad y de excelencia, seguro de invalidez y capacitación en posgrados”.
Álvarez Pulido dijo que son “25 campos de provincia los que están en esas condiciones de precariedad laboral y salarial”.
Explicó que a ningún afectado le notificaron formalmente sobre su despido. “No nos asignaron materias para el semestre que está por comenzar y se las dieron a otros.”
De la Torre Fernández subrayó que la diferencia de sueldos es notoria. “Un profesor de mi categoría, nivel B de asignatura, gana 100 pesos la hora, pero en el campus Tlalpan perciben 170. Hay otros donde la diferencia es más dramática, porque ganan 63 pesos. La desigualdad es enorme y es solapada por el Sindicato Justo Sierra, el cual también permite el outsourcing, pues a nosotros nos paga la Administradora del Valle de Texcoco, la que tiene los mismos dueños y aparece con la misma dirección fiscal”.