■ Engaño, característica de la campaña pro reforma a Pemex, dice Eduardo Navarrete
La consulta también impulsará nueva forma de ejercicio ciudadano: Encinas
Ampliar la imagen Jorge Eduardo Navarrete, Alejandro Encinas, Manuel Bartlett y Armando Bartra, durante el foro, que se realizó en el salón Ángeles Foto: Yazmín Ortega
La consulta de este domingo no sólo permitirá conocer la opinión y el estado de ánimo de los habitantes en torno al futuro del petróleo, sino también acreditará una nueva forma de ejercicio democrático de la ciudadanía, sostuvo Alejandro Encinas.
En el foro Petróleo para principiantes –organizado por el grupo Farándula– también se dieron cita el embajador Jorge Eduardo Navarrete, el filósofo Armando Bartra y el ex senador priísta Manuel Bartlett, quienes expusieron ideas y propuestas tendientes a mantener la propiedad de los recursos naturales en favor del pueblo de México.
En el viejo salón Ángeles de la colonia Guerrero, Encinas enfocó su participación en la relevancia de la consulta de este domingo, a pesar de los denuestos y falsos calificativos que desde distintos ámbitos del poder se han lanzado.
“Ahora se ha vuelto a abrir una discusión sobre esta supuesta contradicción entre la democracia representativa y la democracia participativa. Se ha llegado a posiciones lamentables, que creíamos ya superadas en el país, como el posicionamiento de Jesús Reyes Heroles, director de Petróleos Mexicanos (Pemex), quien dice que el pueblo de México no está apto para opinar sobre la reforma energética. Hemos llegado a tal extremo de polarización y confrontación, que en el intento por desacreditar y minimizar la consulta se les olvida que ésta es la búsqueda por ejercer nuevas formas de derecho y ampliar espacios democráticos. Los derechos no son estáticos, inermes, sino dinámicos, dialécticos. Se van conquistando.”
Con el respaldo de los asistentes al foro, el ex jefe del Gobierno del Distrito Federal manifestó que de la edificación de la democracia directa se desprende el reconocimiento a la soberanía como prerrogativa del pueblo, porque éste es libre de modificar sus formas de gobierno de manera permanente.
“Por ello este domingo hagamos un ejercicio democrático serio e importante, invitemos a todos a votar, en contra o en favor de la iniciativa. Vaya que se ha venido acreditando la consulta, no sólo para enfrentar el enorme desprecio de la derecha por la opinión de la gente, sino para buscar y desenmascarar los alcances de esa reforma. Vale la pena tener un ejercicio transparente, que la gente vote en libertad. Vamos a demostrar que la gente no quiere la privatización de Pemex, que está bien informada y sabe de qué se trata.”
Para el embajador Jorge Eduardo Navarrete, el engaño pasó a ser signo distintivo de la campaña mediática del gobierno para enarbolar los favores de su propuesta de reforma a Pemex.
Refirió: “No sé qué tan importante fue el número de ciudadanos que el 8 de abril, hacia las 20 horas, vieron en red nacional la declaración de (Felipe) Calderón presentando las iniciativas para la reforma a Pemex, a la que él se refiere como energética. En ese mensaje quedó clara la magnitud del engaño de que nos quieren hacer víctimas.
“Cualquiera que revise ese video, que está todavía en la página web de la Presidencia y que quizá todavía no hayan editado, encontrará que Calderón dice que con los recursos que van a conseguirse si esa reforma se aprueba será posible dar educación a todos los jóvenes de México, garantizar condiciones de salud a toda la población, erradicar la pobreza y –palabras textuales– hacer de México un país desarrollado. ¡No sé cómo no le ganó la risa cuando dijo eso! No se puede decir eso con la cara seria.”
El académico Armando Bartra consideró que quizá lo más grave en el caso del petróleo son sus virtudes. Paradójicamente, es un energético generoso y eficiente, porque está ahí; el esfuerzo de producir ese aceite negro ya lo hizo la naturaleza, a través de millones y millones de años, preparándolo para que se llegara con el popote y se absorbiera en 250 años, y se acabó un esfuerzo de millones y millones de años que generó una fuente de energía que por sí misma es excepcional.
“El petróleo creó adicción. Es una droga mucho más poderosa, adictiva, que cualquier otra. Hoy no podemos hacer nada sin él. El crudo generó adicción que está incluso en la manera de pensar, es un consumo insostenible de energía que además es destructivo de la naturaleza. La paradoja es que si no lo tenemos, el que nos queda, que no es poco cuando conviene decir que es poco ni tanto cuando conviene decir que es mucho, es nuestra tabla de salvación. Si lo perdemos se disipará la posibilidad de un aterrizaje suave en otro tipo de consumo de energía.”
Si no se conserva y utiliza racionalmente, no sólo en términos de renta petrolera, sino también de utilidades, “si dejamos que se nos vaya de las manos, estamos enajenando nuestro futuro”.
Manuel Bartlett refirió que el tema petrolero se encuentra bajo “presión última” de los grandes intereses económicos –que comenzó con la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
“La desesperación de estos grupos poderosos es tremenda. Bush dijo, tengo la cita, que se acabe la posibilidad de esta excepcionalidad mexicana no tiene por qué ser. Es necesaria la seguridad energética de América del Norte. Estados Unidos está desesperado, ya quiere ir a controlar la producción al Golfo de México”.