Isocronías
■ El venadito
Ay, venado, venadito
venadito que agua bebes
en el manantial solito,
te pido que en sueños lleves
este lucero bendito
entre tus astas tan leves
hasta el corazón que evito
mirar de viernes a jueves
porque en él me precipito
como alud entre las nieves.
Ay, venado, venadito,
anda, que un favor me debes.
Yo no sé si soy el viento
o si soy esta canción,
pero de que me arrepiento
por no tener corazón
pa soltar el sentimiento
buscando cualquier razón,
me arrepiento, me arrepiento…
No sé cómo la ocasión
se me dio de este momento
sin ni una preocupación:
ya no sé si soy el viento
o si acaso esta canción.
Voy cantando mi tonada,
venadito, por el río:
“Si la vida fuera nada,
si yo fuera este vacío,
si la palabra cansada
de la que entero me fío
me dijera su mirada,
que se quedó en el Bajío…”
No sé cómo no me invada
el definitivo frío.
Voy cantando mi tonada,
venadito, por el río.
Ay, venado, venadito
venadito que agua bebes
en el manantial solito,
te pido que en sueños lleves
este lucero bendito
entre tus astas tan leves
hasta el corazón que evito
mirar de viernes a jueves
porque en él me precipito
como alud entre las nieves.
Ay, venado, venadito,
anda, que un favor me debes.
Con música de Pedro Manuel Sosa