■ Que se limite a vehículos por nivel de contaminación y no por antigüedad
Cambiar criterios de restricción del Hoy no Circula, propone experto de la OCDE
El presidente del Grupo de Transporte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Axel Friedrich, afirmó que el Hoy No Circula Sabatino es una medida plausible para reducir el nivel de contaminación de la ciudad; sin embargo, recomendó al gobierno de la ciudad que en vez de restringir a los vehículos por criterios de antigüedad, debería limitarlos con base en los niveles de emisión de contaminantes a la atmósfera.
Agregó que no entiende por qué el gobierno no introduce combustibles limpios, ya que la inversión en éstos representa una cantidad 10 veces menor que los gastos que implican las enfermedades provocadas por la contaminación ambiental.
El ex funcionario de la Agencia Federal de Medio Ambiente de Alemania manifestó en conferencia de prensa que entre las principales medidas que México debe considerar para disminuir el índice de contaminación, y muy particularmente en la capital, está promover una participación más activa de la población; incorporar el uso de combustible limpios, como el diesel ultra bajo en azufre, y desarrollar un plan integral con el cual se incrementen y refuercen las medidas de mejoras ambientales.
El especialista agregó otras medidas, las cuales fueron adoptadas en su país con resultados efectivos, como la reconversión de vehículos para utilizar combustibles limpios y de bajo azufre; el uso y aplicación de nuevas tecnologías que permitan reducir las emisiones contaminantes, como pueden ser los filtros; la reconversión de refinerías que permitan la producción de combustibles bajos en azufre, y la ampliación de leyes, normas y regulaciones en favor del medio ambiente.
Hizo un llamado al gobierno a mejorar el sistema de transporte público, para que la población “se enorgullezca” de éste y haga un mayor uso de él. Sostuvo que en México la población de mayores recursos no utiliza este tipo de transporte porque considera, de manera equivocada, que es un servicio “para pobres”.
Puso el ejemplo de Alemania, donde el gobierno ha creado un impuesto que se aplica de acuerdo con el grado de contaminación de cada vehículo; “paga más quien más contamina”, y los fondos recaudados se invierten en la mejora del transporte público.
Agregó que otra medida que se ha aplicado en Alemania es dotar a los vehículos que menos contaminan con una calcomanía que les permite circular por toda la ciudad, mientras que a aquellos que carezcan de este distintivo se les restringe o prohíbe la circulación por ciertos cuadrantes urbanos.