■ El financiamiento en estas áreas requiere de “tiros de precisión”: Romero Hicks
La Declaratoria de Monterrey, impulso a ciencia y tecnología
■ El gobernador de NL presentará el documento final ante la Conago
■ La conferencia, propuesta inédita para la vida del país, destaca
Monterrey, NL., 4 de julio. Los participantes en la Conferencia Nacional de Ciencia y Tecnología se comprometieron a promover acciones conjuntas con el fin de impulsar el conocimiento y la innovación para contribuir a la solución de los problemas nacionales y lograr así repercusiones en el bienestar general de la población y en el desarrollo sustentable.
Al concluir la conferencia, celebrada en esta ciudad con el apoyo del gobierno de Nuevo León, se suscribió la Declaratoria de Monterrey, en la que representantes de instituciones nacionales de educación superior, de los consejos estatales y nacional de ciencia y tecnología, empresarios y autoridades locales consideraron “indispensable y urgente convocar a la formulación de un acuerdo nacional para contribuir al desarrollo económico y social del país”.
Durante la clausura del encuentro, el gobernador José Natividad González Parás subrayó que ciencia, tecnología e innovación (CTI) son instrumentos fundamentales para generar desarrollo, progreso y equidad en la sociedad. Por ello, exhortó a los gobiernos estatales a jugar un papel más activo en este campo.
Resaltó que los recursos para esas áreas deben “elevarse a rango de prioridad” en los presupuestos federales y estatales, además de pugnar porque se incrementen constantemente.
Consideró que la conferencia fue un “encuentro histórico en la vida de México” por los acuerdos alcanzados y por la participación de personalidades como el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, José Narro Robles; el director del Instituto Politécnico Nacional, Enrique Villa Rivera; el secretario general de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, Rafael López Castañares; así como representantes de las áreas académica, empresarial, gubernamental y del Poder Legislativo, quienes dieron el visto bueno a la declaratoria con la que se emprenderán acciones en favor de CTI en el país.
El mandatario estatal indicó que la Conferencia Nacional de Ciencia y Tecnología representó un espacio de reflexión, diálogo y análisis, donde se formuló “una propuesta inédita para la vida del país” que concluyó con la Declaratoria de Monterrey, documento que González Parás se comprometió a presentar en la Conago para que ese organismo analice su pertinencia e impulse políticas en favor de CTI.
Señaló que es necesario federalizar el conocimiento y que tanto representantes gubernamentales como del sector científico deben persuadir a los empresarios para que participen de manera más activa en la investigación, formación de capital humano, innovación, desarrollo de infraestructura y generación de conocimiento.
Confió en el liderazgo que pueda tener en ese sentido el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología e insistió en dar mayor impulso a la alianza entre los tres sectores estratégicos para ese rubro: academia, gobierno e iniciativa privada.
La Declaratoria de Monterrey destaca, además, la promoción de alianzas para la generación de conocimiento que permita “atender las demandas sociales prioritarias, tales como proteger la biodiversidad, asegurar el suministro y calidad del agua, aumentar la seguridad pública, mantener el estado de derecho, erradicar la pobreza, preservar la seguridad alimentaria, mitigar los efectos de los desastres naturales, proteger la salud, resolver de forma anticipada los problemas relacionados con el cambio climático y asegurar la disponibilidad de energía”.
Asimismo, propone “fomentar y propiciar una política de Estado que genere una sinergia en el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación que impulse la producción de bienes y servicios de alto valor agregado y la formación de capital humano de excelencia, mismos que deben ser apoyados con una mayor inversión pública y privada”.
Otro punto del acuerdo es “generar un dinamismo nacional que eleve la calidad, equidad, pertinencia y cobertura de la educación superior; en particular la orientada a formar científicos y tecnólogos”.
■ La academia debe ser humilde: Conacyt
Emir Olivares Alonso
Enviado
Monterrey, NL., 4 de julio. El director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Juan Carlos Romero Hicks, planteó que para impulsar el desarrollo científico y tecnológico en el país se necesita de mayor inversión –pública y privada–, formación de capital humano, mejor y mayor infraestructura y potenciar la cooperación académica nacional e internacional. Agregó que en la política de Estado en la materia deben participar “tres actores principales”: academia, gobierno y empresariado.
Ante las críticas de la academia en el sentido que México carece de una política de Estado en el área, señaló que ese sector debe ser autocrítico: “Tienen que mirarse primero a sí mismos para ver qué es lo que están haciendo, qué dejan de hacer y qué es lo que proponen. La academia debe tener más humildad, autocrítica, reflexión y pertinencia para no sólo hacer las cosas de manera excelente, como se espera, sino también con un sentido de trascendencia y sin coartar su libertad de investigación”.
Entrevistado al terminar la segunda reunión ordinaria de la Conferencia Nacional de Ciencia y Tecnología, realizada en esta ciudad, el director del Conacyt también llamó a reflexionar a los gobiernos locales y federal, así como a la iniciativa privada, sobre su labor en favor de estos rubros.
Indicó que para favorecer a ciencia, tecnología e innovación (CTI) se debe considerar como elemento fundamental al sentido de pertinencia: “Tenemos que saber cuáles son las preocupaciones y temas nacionales y cómo combinar a una sociedad de conocimiento y aprendizaje, con libertad académica, que responda a temas como pobreza, agua, cambio climático, diversidad, alimentación, energía, salud, desastres naturales y todo lo que está en la vida cotidiana”.
Resaltó que se necesita mayor financiamiento para estos rubros, aunque consideró que los recursos no bastan por sí mismos y “requieren tiros de precisión”, es decir, hacia dónde se van a dirigir. “En una sociedad con tantas necesidades hay una competencia de recursos, por lo que necesitamos tener mejores diseños para que cuando se establezca cualquier tema nacional se pueda decir cómo vamos a realizar la distribución correspondiente”.
A revisión el PEF
La inversión pública debe ser federal, estatal y hasta municipal, pero también se requiere la privada y buscar mayores fondos internacionales. “Queda claro que el monto de inversión (como procentaje del PIB) está en desventaja y en gran asimetría”, y aunque en breve México alcanzará 0.52 por ciento, “es sólo la mitad de lo que marca la ley, por eso los tres actores, debemos analizar la manera de cómo lograr una mayor inversión”.
Propuso impulsar la “movilidad y circulación de cerebros” mexicanos debido a que en todo el mundo los investigadores que realizan estudios en el extranjero en pocas ocasiones regresan a su lugar de origen, con lo que se reduciría la necesidad de la repatriación de investigadores nacionales.
Reconoció que el Programa de Estímulos Fiscales (PEF) del Conacyt beneficia en ocasiones a empresas que no generan patentes –como lo publicó este diario– por lo que debe revisarse. Sin embargo, acotó que la innovación no sólo engloba patentes: “hay indicadores de que ciertas empresas tienen un avance muy significativo por medio del PEF no sólo en patentes, sino en prototipos y diseños, en cultura de la propia innovación, por lo que ninguna evaluación se puede reducir a un solo indicador”.