■ Acuerdan sostener al auditor de Hacienda otros 42 meses, no 84
Concluye diferendo entre PRI y PAN que paralizó una semana el Congreso de Sonora
Hermosillo, Son., 1º de julio. Las fracciones panistas y priístas en el Congreso de Sonora acordaron mantener por otros tres años y medio al auditor mayor de Hacienda, Eugenio Pablos Antillón, y no los siete que proponían los del tricolor, asunto que paralizó la actividad legislativa la semana pasada.
La diferencia en este punto, que se difundió la semana pasada, se desató cuando los priístas anunciaron su intención de hacer cambios a la Ley de Fiscalización para lograr, entre otras puntos, que el contador mayor de Hacienda –que termina en diciembre su gestión de cuatro años–, siguiera en el cargo otros siete años.
Finalmente, en la reunión del lunes decidieron que Pablos Antillón continúe tres años y medio tras concluir su gestión.
Los panistas se opusieron en un principio a los cambios y advirtieron que, de aceptarse, el titular del Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF) tendría mayores atribuciones en la supervisión de las cuentas públicas de los gobiernos municipales y estatal, lo que fue calificado de “retroceso” por el coordinador de la bancada del blanquiazul, Francisco García Gámez .
Pese a los argumentos señalados, los diputados aprobaron dicha ley el lunes, sólo que determinaron que cuando concluya la gestión actual, Pablos Antillón continuará sólo tres años y medio más, a cambio de lo cual, los panistas propondrán al siguiente auditor mayor por los próximos 42 meses. Luego de ser negociada la diferencia, los legisladores aprobaron la citada ley con 29 votos en favor, uno en contra y dos abstenciones.
“Acuerdo desastroso”
La diputada perredista Petra Santos Ortiz, quien votó en contra, señaló que “finalmente los panistas y priístas llegaron a un arreglo, muy perjudicial para el estado, por cierto, pero claro, ellos no te van a decir eso o no lo van a aceptar porque ahorita no quieren dar la cara”, argumentó.
Destacó que si los panistas en un principio se habían opuesto a que el gobierno priísta de Eduardo Bours y sus diputados dieran mayores poderes al auditor mayor, al final de cuentas “doblaron las manos” y a cambio obtuvieron el poder de proponer al siguiente auditor mayor, por lo que, dijo, aceptaron dar todo el poder sobre ese órgano al mandatario estatal.
Explicó que fue una decisión “totalmente desastrosa”; se aprobó con los votos de 13 panistas, 14 priístas y dos más de Convergencia, por lo que “ahora el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF) ya no va a rendir cuentas al Congreso del estado, sino que tiene un lazo directo con el gobernador Eduardo Bours”, dijo Santos Ortiz. Señaló que este fue el último acuerdo del periodo ordinario de sesiones que culminó el lunes.
Agregó: “Ahora empiezan las sesiones de la diputación permanente, a las que desde luego yo no puedo asistir porque se han dedicado a bloquear mi participación por la postura crítica que he tenido contra el gobierno del estado”, dijo Petra Santos.
Contrariamente a las declaraciones de la diputada perredista, el Congreso aseguró que la nueva Ley de Fiscalización dotará de mayores poderes al ISAF para cumplir en beneficio de la comunidad.
En el dictamen aprobado por los diputados se afirma: “Con esta ley dotamos de todas las herramientas jurídicas necesarias al ISAF, para que cumpla con sus obligaciones de fiscalizar el gasto público de todos los entes de gobierno”.